Una realidad de supervivientes será expuesta a los tijuanenses el próximo jueves 02 de marzo en el CECUT, con la obra “Nada vende mejor que una historia de supervivencia”; después de su gira por el noroeste del país -Sinaloa, Chihuahua, Sonora, Baja California Sur-, la obra regresa a su ciudad de origen para hacernos comprender la complejidad del tema oculto que se nos va revelando poco a poco a través de la indagación de un niño reportero que se adentra en la pesadilla de las víctimas para obtener los testimonios que recuerdan cómo eran las cosas antes, durante y después de los terribles acontecimientos.

Debido a que México es el primer país del mundo en abuso sexual de menores, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la emblemática
ompañía Teatro en el Incendio llevó a cabo una investigación escénica para idear esta obra original, en la que se aborda uno de los temas más incómodos de la actualidad, con la finalidad de promover la denuncia.

El 90% de los abusos es perpetrado en el interior de los hogares y en el entorno familiar, por lo que la denuncia se vuelve aún más complicada y vergonzosa; sin embargo, esta obra consigue desmitificar el tabú en torno al tema, por medio de la historia de un pequeño reportero que conduce un programa documental sobre supervivientes que no se atreven a dar testimonio por el dolor y el miedo que les produce la recreación de los terribles
acontecimientos; sumergiéndose en sus memorias por medio de representaciones que “embellecen” la forma de contar las cosas, el reportero va descubriendo las catástrofes que provocaron la destrucción de sus hogares; entre los vestigios de una casa reventada por la hierba y el moho que le creció desde el interior, el reportero va desentrañando el porqué de la culpa que sienten las propias víctimas de esta repetida historia.

La investigación sobre víctimas y victimarios, en los propios testimonios de los actores-creadores, sobre experiencias propias o cercanas, fue parte de la metodología de trabajo del director Gilberto Corrales, para procurar que la obra permita a las personas supervivientes de abuso sexual infantil reconocerse en ella. Hacer esta obra representó un reto muy difícil para los actores, porque tuvieron que enfrentarse a una realidad que resulta tan incómoda como dolorosa, que muchas personas prefieren no saber o incluso olvidar como mecanismo de defensa: por ello la obra está fragmentada como si se tratara de la reconstrucción de la memoria selectiva de las víctimas.

De cada 1,000 casos de abuso sexual cometidos contra menores en México, solo 100 se denuncian y de estos, únicamente el 10% llega ante un juez. De ellos, solo el 1% recibe una sentencia condenatoria; y es que una víctima de abuso sexual infantil puede tardar décadas en denunciar pero, con ayuda de esta obra, se busca concienciar sobre la importancia de denunciar aún en la edad adulta: ¿por qué si hay historias de supervivencia que nos inspiran, deberíamos avergonzarnos por sobrevivir a esto? El que sea un tema tabú, perpetúa la cultura de la no denuncia, y permite que este tipo de comportamientos se siga heredando generación tras generación.

Las personas menores de edad están admitidas a la presentación única en la Sala de Espectáculos del CECUT, el jueves 02 de marzo a las 7pm, con el propósito de que los padres, madres o tutores, tengan la oportunidad de hablar del tema con sus menores; sin embargo, la obra está principalmente dirigida a todas aquellas personas adultas que tuvieron que crecer con el secreto de haber sido víctimas de abuso en la infancia, para que los tijuanenses logremos trascender el sufrimiento o, en su caso, que comprendamos cómo identificar y prevenir este tipo de situaciones en los infantes.

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