La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) estima que la economía mexicana se desacelerará a un rango entre 2.0% y 3.0% en 2025, primer año del nuevo Gobierno, desde un intervalo de 2.5% y 3.5% proyectado para este año, el último del sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
De acuerdo con los llamado Pre-Criterios 2025, estas estimaciones están en línea con las presentadas en el paquete económico aprobado para 2024, pero por debajo del crecimiento de 3.2% que registró el Producto Interno Bruto (PIB) de México durante 2023.
Precisa que la posible moderación respecto al desempeño observado en 2023 obedecería a la normalización del desempeño de algunos subsectores del sector servicios con desempeños extraordinarios por la reapertura de actividades tras el paso de la pandemia del Covid-19.
Asimismo, a la disminución del ahorro acumulado de los hogares, así como a la previsión de un menor crecimiento de Estados Unidos con impacto en las exportaciones, el turismo y la entrada de remesas.
Para la inflación, los Pre-Criterios, documento con el cual da inicio la discusión del paquete económico para 2025, e último que presenta esta administración, pero que será negociado por el nuevo Gobierno, estiman una inflación de 3.8% para 2024 y de 3.3% para el año próximo, esta última superior al 3.0% fijado en el paquete económico para el cierre de 2024.
Para el tipo de cambio, los pronósticos son de un precio de 17.8 y 18.0 pesos por dólar al cierre de 2024 y 2025, cotizaciones ligeramente por arriba de las de 17.6 y 17.9 pesos por dólar, respectivamente, aprobadas en los Criterios Generales de Política Económica (CGPE) de este año, lo que refleja un peso más débil.
En contraste, la SHCP anticipa menores tasas de interés, con Cetes a 28 días en 9.5% y 7.0% este año y el próximo, respectivamente, contra las estimaciones previas de 11.3% y 9.5%, en cada caso, incluidas en los CGPE.
Para el precio del petróleo (Mezcla Mexicana de exportación), los Pre-Criterios pronostica una cotización de 71.3 y 58.4 dólares por barril en 2024 y 2025, precios superiores a los previstos en los CGPE, de 67.0 y 56.7 dólares por barril, respectivamente.
MAYOR DÉFICIT PUBLICO ESTE AÑO
En el caso de las finanzas públicas, hacia el cierre de 2024, se anticipa el cumplimiento de las metas fiscales, así como un nivel estable de la deuda pública.
Al interior de la proyección de cierre, se prevé que los ingresos presupuestarios representen 21.9% del PIB al cierre de este año ligeramente por arriba de lo previsto en la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) aprobada, de 21.3%, impulsados por mayores ingresos petroleros.
Esto, en un entorno de precios del petróleo más altos que lo programado, así como mayores ingresos tributarios, cuyo crecimiento se verá beneficiado por el mejor cierre observado en 2023 respecto a lo estimado en el Paquete Económico 2024.
Así, la recaudación alcanzará un nivel de 14.6% del PIB al final del año en curso, impulsada por el desempeño de la recaudación del Impuesto sobre la Renta (ISR).
No obstante, hacia 2025, se prevén ingresos presupuestarios por 21.5% del PIB, menor respecto a lo estimado para 2024, derivado de la evolución estimada de la actividad económica y el empleo, así como de los efectos de las medidas de eficiencia recaudatoria.
En materia de gasto público, en lo que respecta al cierre de 2024, se proyecta un incremento a 26.9% del PIB, mayor respecto al 26.2% programado. Hacia 2025, en cambio, se anticipa un menor gasto, equivalente a 24% del PIB, derivado de una reducción del costo financiero, en un entorno de menores tasas de interés a nivel internacional.
Considerando lo anterior, se prevé que los Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP) alcancen casi dos billones de pesos en 2024 (un billón 997 mil 138 millones de pesos), equivalente a 5.9% del Producto Interno Bruto, pero la cifra fue actualizada respecto a la aprobada para este año de un billón 864 mil 872.3 millones de pesos o 5.4% del PIB.
Para 2025, los RFSP se moderarán respecto al estimado para este año, a un billón 070 mil 596.8 millones de pesos, lo que representa 3.0% del PIB, pero este porcentaje es superior al 2.6% del Producto considerado en los CGPE de 2024.
“Si bien se prevé un mayor déficit presupuestario con respecto al cierre del año anterior, éste tendrá un carácter transitorio”, aseguró la Secretaría de Hacienda.
Así, la deuda pública en su medida más amplia (Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público) alcanzará 50.2% del PIB al cierre de este año, por arriba de 48.8% aprobado para 2024, aunque hacia 2025 se proyecta que se mantengan en 50.2% del Producto.