En las últimas semanas, para México, ha surgido una estadística económica que según beneficia en la forma como es visto por el mundo en los intercambios comerciales que se llevan a cabo en forma diaria.
Pero esto dista mucho de la realidad, debido a que existe un desmesurado análisis real; si esto realmente está pasando desde el punto de vista de un balance comercial, entre lo exportado e importado.
El objetivo del balance; tener un déficit amplio. A donde indique que hay una mayor cantidad de productos enviados a un país, y con el cual, tenemos una relación, tratados o acuerdos comerciales, para poder intercambiar lo hecho o producido, respecto a lo que nosotros introducimos a nuestro mercado, al no producirlo o hacerlo. Exportar más e importar menos. Tener un superávit comercial.
Hoy, según dicen los datos del censo de Estados Unidos; México tiene el primer lugar de los países que el país de las barras y estrellas importa, para satisfacer a su mercado al cierre del 2023. Pero aquí está un listado de las realidades que no están siendo vistas y evaluadas.
La primera realidad. El primer lugar que ocupa México en el pasado año sobre su vecino del norte, se refiere a que envía tecnología en su mayoría ensamblada, y que no es propia de una innovación de algo hecho con una patente originaria de alguna empresa mexicana o mexicana.
México exportó, según datos del Banco de México en el 2023 del total enviado a Estados Unidos, un 36 % de máquinas y aparatos, material eléctrico y sus partes y; en segundo lugar, con el 28 % material de transporte (ensamblado). Confirmando la vocación de México, un país ensamblador de tecnología.
La segunda realidad. Decimos que hemos quitado el primer lugar a China de los países que más importan a Estados Unidos, y esto es cierto a medias. Lo importante de los intercambios es el saber, si lo creado e intercambiado, hay una dependencia o no, sobre adquirir lo que un país produce o hace. En este caso, de acuerdo con los datos del 2023, el país asiático tiene un déficit de -280 mil millones de dólares, y México de -152 Mil Millones. Confirma que el socio de México en el TMEC, depende de dos veces más de China que de México, y, por lo tanto, ellos tienen la ventaja, debido a que ellos sí producen tecnologías.
La tercera realidad. China, disminuyó lo que exporta a Estados Unidos, pero lo recuperó con el déficit que tiene con México. Debido a que, y de acuerdo con la balanza comercial con este país, fue de -104 mil millones de dólares. México importó en el 2023 del total enviado por China, 54 % de máquinas y aparatos, material eléctrico y sus partes y, en segundo lugar, con el 10 % material de transporte (ensamblado). El país asiático nos manda su tecnología para armar, y poder enviar vía nosotros a Estados Unidos con base al acuerdo del TMEC, y por ser un producto armado en México, algunos de estos no tienen las mismas tarifas arancelarias que tendrán a lugar, si fueran enviados en forma directa a los Estados Unidos. Es aquí a donde México, debe tener cuidado debido a que algunos congresistas de nuestro socio, han estado pugnando por identificar, si realmente son tecnologías que provienen de China. En el caso de ser así, podrían tener otro tratamiento arancelario bajo el acuerdo actual. Confirmado están monitoreando al nerashoring.
La cuarta realidad. El país asiático, entre Estados Unidos, y México; tiene una ganancia de la balanza comercial de alrededor de 256 mil millones de dólares en el 2023. Ambos países, que son parte del TMEC, dependen de lo que este país pueda enviarles, para poder cubrir sus mercados. Confirma, China supo capitalizar su nearshoring, y México, no ha sabido cómo usar los tratados comerciales.
La quinta verdad. México importó en el 2023 del total enviado por Estados Unidos, el 23 % de las máquinas y aparatos, material eléctrico y sus partes y, en segundo lugar, con el 16 % productos minerales (donde están los combustibles). Confirmando que México ensambla, y no produce los combustibles necesarios para mover a los motores que circulan en el país, y el combustible fósil para crear energía.
La sexta realidad. La balanza comercial de México; es negativa actualmente en el 2023 entre lo que importa y exporta en su totalidad; independientemente de que en su mayoría no quede para el consumidor mexicano.
En 2019 al 2020, fue positiva, y a partir del 2021 a la fecha ha sido negativa. Este último año, fue de alrededor de 5.4 mil millones de dólares. Ahora que México, dejará de exportar petróleo crudo, habría un mayor déficit, y en el dado caso en que esto hubiera pasado en 2023, el déficit será de más de 33 mil millones de dólares. Hay que tener cuidado con lo que expresamos de adentro hacia fuera, debido a que, una vez puesto un sonido, puede afectar al mercado, creando incertidumbre, a donde no debería haber. Confirmado, no sabemos hacer negocios.
La octava realidad. México, el nearshoring enfrentará un gran problema sobre la forma como deberían ser enviados los productos armados, ensamblados o terminados. Actualmente, el 64 % del todo exportado es enviado, movido y transportado por carretera. Pero el efecto contrario sucede en lo que importa México, debido a que es movido del total, un 47 % por carretera, y un 37% arriba en forma marítima a los puertos. Entonces, la inseguridad en las carreteras actualmente confirma que será un problema en el corto a largo plazo, y que podría crear incertidumbre para quienes quieren venir a instalar, debido a que podría incrementar los costos operativos, y seguridad física de sus empleados.
La novena realidad. México en el caso dado que el TMEC, no fuera renovado, y fueran acuerdos comerciales bilaterales entre cada una de las partes que lo integran actualmente, estaría en problemas. Debido a que si China, usa para ensamblar su tecnología a México, y este envía a EUA, bajo el argumento de origen, esto podrían cambiar las reglas arancelarias y dejar ante el mundo a la merced de quien pueda comprar. Hoy México exporta a sus dos socios más de 500 mil millones de dólares y a China, tan solo 10 mil millones. Confirma que México, debe pensar a quién tener una lealtad comercial. Debido a que hoy hay un superávit comercial con sus socios, y con China déficit por más de 104 mil millones de dólares.
La realidad unificada. Exportar mucho no significa, saber hacer negocios e intercambios comerciales. Tener un déficit positivo, indica que hay un flujo de efectivo adicional circulando en una economía, no tenerlo, significa que hay fuga de dinero, y esta tiene que ser sustituida. Estos dineros, van a otras economías para su crecimiento.