El estrés laboral se ha convertido en una epidemia para los trabajadores mexicanos sin importar si se trata de un empleo típico o en home office, al menos eso piensa el 64% de la fuerza de trabajo de nuestro país.
The Future of the Working Week, un estudio de Citrix, reveló que más de la mitad de los trabajadores de nuestro país considera que México está atravesando por una epidemia de estrés laboral. Una respuesta preocupante en un contexto en el que la Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyó el desgaste profesional como enfermedad de trabajo y ante la entrada en vigor en octubre de la segunda fase la NOM 035 para prevenir riesgos psicosociales en el trabajo.
Las cifras oficiales también reflejan el estrés laboral que enfrenta el mercado de trabajo mexicano. De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el 75% de los trabajadores padece fatiga por estrés laboral.
Una de las causas de esta enfermedad de trabajo son las horas extra que laboran los mexicanos y su falta de regulación. Según The Future of the Working Week, el país es el primer lugar entre nueva naciones de horas extras trabajadas.
El 95% de la fuerza laboral mexicana asegura haber trabajado horas extra durante su carrera profesional, mientras que el 44% reportó que se encuentra en esta situación todos los días. El 31% de los trabajadores ha laborado horas extras por encima del promedio de 3 horas con 29 minutos a la semana.
La principal razón por la que los trabajadores mexicanos deciden realizar horas extras es porque las consideran una vía para obtener promociones y bonos. El segundo motivo, es el flujo de trabajo y las metas desalineadas con la realidad y, el tercero, la cultura del negocio.
Semana de 4 días ¿La solución?
El 86% de los trabajadores aceptaría una semana de 4 días, siempre y cuando se les respete su sueldo. Sólo un 4% de los empleados no quiere una reducción de la jornada semanal por temor a que se le reduzcan prestaciones y otros beneficios como trabajo flexible.
En los últimos meses, varias empresas de países como Japón, Nueva Zelanda o España han informado de la implementación de una semana laboral de cuatro días, sin aumentar las horas de jornada diaria y con el salario completo para sus colaboradores.
Aunque las tecnologías de movilidad han impulsado políticas de trabajo más flexibles, en México este concepto resulta todavía muy lejano para los trabajadores, ya que el 44% cree que su empleador no estará nunca en la disposición de implementarlo. Además, la mitad piensa que no resulta probable que lo hagan en un futuro cercano y el 74% siente más cerca una semana laboral de 6 días que de 4 días.
“Las empresas mexicanas deben impulsar políticas innovadoras que brinden a los empleados un mejor balance entre la vida profesional y personal. La correcta implementación de estos programas de Recursos Humanos junto con tecnología que impulse la transformación de los lugares de trabajo a partir de las necesidades humanas resulta el equilibrio ideal para mejorar la productividad, la satisfacción y promover una colaboración activa acorde a las retos y objetivos de los negocios en una economía digital tanto presente como a futuro”, explica Martín Borjas, country manager de Citrix México.
El estudio de Citrix destaca que el talento mexicano cree que una semana laboral más corta les permitiría ser más productivos y creativos, focalizándose en el logro de objetivos concretos, al mismo tiempo de obtener un mejor equilibrio entre el trabajo y la vida personal.