México puede ser beneficiado con el programa “Bono Solar”, que se proyecta implementar en el país para crear condiciones a favor de la adopción de la tecnología solar, destacó Lucas Grosseheide de la Agencia de Cooperación Alemana al Desarrollo.
Se trata de una propuesta de programa para reorientar el subsidio eléctrico hacia inversiones en techos solares en viviendas residenciales, explicó en entrevista.
El objetivo es maximizar el beneficio social de los recursos públicos, y dar acceso a los usuarios a los beneficios económicos (reducción en su gasto por concepto de electricidad), sociales y ambientales de la tecnología solar fotovoltaica, resaltó.
Solar Power Mexico
El proyecto se dará a conocer en la conferencia: “Bono Solar: The Big Opportunity for Solar Developers and Mexican Society to Participate in the Energy Transition”, en el marco de la feria Solar Power Mexico, el próximo 21 de marzo en esta ciudad.
Grosseheide dijo que en este momento, el subsidio eléctrico es regresivo, pues los usuarios de mayores ingresos (10 por ciento de la población), reciben cuatro veces más subsidio que el 10 por ciento de la población en situación de pobreza.
“Los subsidios eléctricos son caros, ineficientes y desincentivan el desarrollo de la generación distribuida.” Se trata de una gran oportunidad para desarrolladores solares y ciudadanos de participar en la transición energética, destacó.
Beneficios del bono
De ser implementado exitosamente, los beneficios del Bono Solar serán la reducción inmediata al gasto por servicio eléctrico, creación de fuentes de trabajo, y atenderá los retos de pobreza energética de la sociedad mexicana.
En materia ambiental, dijo, el modelo contribuye al cumplimiento de las metas de mitigación de gases de efecto invernadero suscritos en el Acuerdo de París. Específicamente disminuye la huella de carbono de los usuarios residenciales.
Esta propuesta la encabeza la Iniciativa Climática de México (ICM) apoyada por la Agencia de Cooperación Alemana al Desarrollo (GIZ), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Mundial y la Embajada Británica en México, anotó Grosseheide.