La peleadora tijuanense Kenia Enríquez tendrá una vitrina especial este 23 de abril en el Forum de Inglewood cuando vea acción en la cartelera de respaldo de la velada que será encabezada por el combate entre Gennady ‘GGG’ Golovkin y Dominic Wade.
“Me siento muy contenta y afortunada, ya que voy a compartir función con uno de los grandes peleadores del momento como lo es Golovkin. Creo que es la experiencia que todos quisiéramos y que pocos tenemos”, dijo a HOY Deportes la originaria de Tijuana, quien en una contienda en el peso minimosca estará enfrentando a Amaris Quintana (9-2-2, 1 KO), de San Diego.
“Va a ser una pelea que va a demostrar el talento femenil. Las dos somos buenas peleadoras. Ella es la mejor ‘ranqueada’ dentro de la división aquí en los Estados Unidos y yo soy una excampeona”, comentó.
Enríquez, de 22 años de edad, tiene una marca de 15 victorias con una sola derrota; siete de sus contiendas las ha definido por la vía rápida. Lleva casi cuatro años en el boxeo profesional y ha ostentado el título femenino de la división de peso mosca de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).
Describe su estilo de pelear como bastante agresivo debido a que le gusta ir hacia el frente tirando muchos golpes.
Dijo que empezó a practicar el deporte de los puños hace 10 años, y lo hizo por razones distintas a las de la mayoría de las niñas que entran a la disciplina.
“Muchos piensan que porque te hacen ‘bullying’ te meten al boxeo, pero en mi caso, fue al contrario. Me gustaba pelearme en la escuela, y entonces mi papá decidió meterme al box”, expresó Enríquez, cuya hermana menor, Tania, también es peleadora profesional. Ambas son entrenadas por su padre Gustavo.
El machismo, un gran obstáculo
Sobre por qué el boxeo femenil ha batallado para establecerse y para conseguir cosas de trascendencia, como encabezar importantes veladas y ganar buenas bolsas a la par de los hombres, Enríquez -quien dijo que lo más que ha ganado por una pelea es $6,000- no cree que sea por cuestión de talento.
Siente que contribuye mucho el machismo que aún perdura en el pugilismo de paga.
“Siempre cuando una mujer empieza a pelear le dicen, ‘mejor vete a lavar los trastes’. Muchos todavía no superan que nosotras también podemos hacer grandes cosas”, dijo la excampeona, quien resaltó las virtudes del boxeo femenino sobre el masculino.
“Yo digo que es más real el boxeo femenil que el boxeo de hombres, porque nunca hemos visto que una mujer se caiga por dinero, nunca hemos visto una pelea arreglada, nunca hemos visto que una mujer entre a un round de estudio. Siempre está tirando golpes, desde el primer hasta el último asalto”.