Hasta hace poco, Cataluña se identificaba principalmente con el cava y sus excelentes blancos; sin embargo, varios de los mejores tintos de España se elaboran en estas tierras.
Los terrenos de Miguel Torres son una bodega familiar que desde el siglo antepasado -fundada en 1870- ha sido la gran impulsora de la viticultura moderna de Cataluña. El apellido Torres está ligado al vino desde hace más de tres siglos, cuando sus antepasados se asentaron en el Penedès, tierra vinícola desde la época fenicia. Definitivamente, al hablar del Penedès y sus vinos tintos hay que citar a la familia Torres.
La empresa es totalmente familiar y selecciona con esmero sus viñas, elabora sus vinos con tecnología precisa y los cría en una extensa cava subterránea con más de 11,000 barricas de roble nuevo. Posee 1300 ha de viña, que le permiten cultivar desde las tradicionales cepas blancas parellada o las tintas garnacha o tempranillo, hasta las internacionales cabernet sauvignon, pinot noir, riesling, chardonnay, sauvignon blanc, etc. Sangre de Toro y Gran Sangre de Toro proceden de variedades tintas locales. La gama de vinos va de los tintos y blancos sencillos hasta los famosos tintos Gran Coronas, Mas la Plana y Las Torres.
Sin más, es una familia que se ha dedicado al cultivo de sus tierras, trasmitiendo su entrega de generación en generación.
De impacto internacional
Son muchos los pasos dados a lo largo de la historia de esta familia para consolidar su apellido.
Actualmente, más de 130 países son en los que el nombre Torres se asocia al vino de calidad. Desde sus tres centros, Cataluña, Chile y California, se ha gestado esta labor.
En Vilafranca del Penedès, Cataluña, se encuentra el origen de Torres en el mundo.
El empleo de la más moderna viticultura y enología, la conservación de las técnicas tradicionales y la renuncia al uso de productos químicos han contribuido al éxito de Torres.
En América, en las colinas del condado de Sonoma, California, comienza la aventura norteamericana de Marimar Torres, la gran presencia de Torres en este estado. Ella es la artífice de vinos tan elegantes como sus Chardonnay y Pinot Noir. Estos vinos crecen en un viñedo de la Denominación de Origen de Sonoma Country, Russian River /Green Valley.
El viñedo, el primero de estilo europeo en la región, con una densidad de plantación de 5 mil cepas por hectárea, produce unos vinos de carácter excepcional.
Y mucho más al sur del continente americano, al pie de los volcanes andinos, en el Valle Central de Chile están las bodegas de Torres.
Los primeros fundos de Torres en Chile fueron Maquehua, San Francisco Norte y Cordillera. A finales de los 90 añadió San Luis de Alico, La Ribera y Los Zorrillos.
Especiales condiciones climáticas, con grandes diferencias térmicas entre la noche y el día, y unas tierras ausentes de filoxera han contribuido a que aquí se elaboren excelentes vinos.
Y por si fuera poco, en 1982 Torres ya exportaba sus vinos a China. Pero algunos años más tarde, en 1997, se estableció una joint-venture con la cooperativa de Shashen, 230 Km. al oeste de Pekín, con el objetivo de mejorar la calidad del vino en China. Las principales funciones de Torres en este país son el embotellado de un vino especial, destinado a ese mercado, y la comercialización de otros vinos propios elaborados en Cataluña, Chile y California.
Los vinos de Miguel Torres te atrapan entre sus colores, aromas y texturas, te va cautivando y seduciendo por sus atributos
Solo debes dejarte «llevar» por sus encantos y gozarlos..