Tener una vida plena implica tener y poder resolver las dificultades que presentan; en realidad es imposible vivir sin problemas, no importa qué tipo de persona seas, las dificultades son parte del protocolo de estar vivo.
Cuando aprendes a resolver efectivamente las complicaciones que se te presentan, te sientes mejor contigo y mejoras tus relaciones personales. Tu entorno se agiliza para que puedas llegar a obtener lo que buscas ya sea en el plano personal, familiar o en tu trabajo.
- Encuentra un punto positivo o amigable para iniciar la plática.
- Recuerda que siempre tienes tiempo para reaccionar. NO discutas, contestes o tomes alguna decisión con enojo o coraje. Cuidado con las palabras filosas.
- Enfócate en resolver el problema, no en atacar o criticar a la persona. No es personal.
- Aclarar el tema es el objetivo único. No Juzgues, ni tomes partido. Queda completamente prohibido hacer una lucha de poder para demostrar quién es el villano y quien es el héroe.
- No te impongas. Todos tienen el derecho de estar en lo correcto, respeta la opinión y el punto de vista de los demás. Busca un punto medio y accesible trabaja en encontrar una solución que se adapte a ambos intereses.
- No asumas o des por hecho conclusiones que no han sido discutidas; tu punto de vista es importante pero el de la otra persona también. Aclara, pregunta y sobretodo ten una actitud flexible, dispuesta a entender el otro punto de vista.
- No interrumpas, escucha, entiende lo que se está discutiendo. Espera a que la persona termine de hablar, recuerda no son competencias y no estás buscando un ganador, simplemente quieres resolver una situación.
- Lo pasado, ya no existe, concéntrate en el presente. Hay que buscar soluciones no justificaciones, concentrarse en el pasado no resuelve nada solo lo complica y llena de resentimiento frustración y enojo.
- Buscar las aéreas de interés común, lleva a buscar una solución efectiva. insistir en las aéreas de desacuerdo solo conduce a prolongar la discusión.
- Asegúrate de utilizar el conflicto que estas resolviendo como una herramienta para construir, mejorar y avanzar. Nunca lo utilices como un arma para manipular o controlar a los demás.
«Cuando se satisfacen solamente las necesidades de una persona, el conflicto no queda resuelto, la discusión continua y el problema se profundiza»
Los conflictos son necesarios para poder avanzar, crecer y sobre todo para mejorar. No les temas, al contario utilízalos como maestros y crea oportunidades que te inviten a salir de tu zona de conforte para poder entender otros puntos de vista y expender tu pensamiento.