A sugerencia de un gran amigo, esta semana me referiré a una situación que “casi no sucede” en Baja California: el uso de los denominados “bots”, así como la intentona de funcionarios con aspiraciones políticas que consideran que el aumento de “likes” es directamente proporcional al incremento de su popularidad en víspera del proceso electoral 2021.

Extrañamente (sarcasmo) hace unos días se detectó una cuenta de Facebook de apoyo al alcalde de Tijuana, la cual es auspiciada por la “Consultoría UABC”, que en realidad es manejada por el exdirector del IMJUV de este Ayuntamiento, aquél que fue removido por manejos considerados como irregulares por el Cabildo. Aparentemente, hoy también es exadministrador de la Delegación de San Antonio de los Buenos, puesto al que fue asignado por el gobierno municipal para rescatarlo.

En lo personal, ya he tenido varias desafortunadas experiencias con perfiles falsos que se empeñan en denostar las publicaciones que hago en redes sociales, incluso, un director municipal se acobardó al eliminar un infundio vertido en mi última columna, que lástima porque me hubiese encantado aclarar su inquietud.

Y hablando del uso de plataformas digitales, aprovecho para hacer un “comercial” ya que este miércoles 16 de septiembre a las 8:30 horas he sido invitado como expositor en la Agrupación Política de Baja California, donde analizaremos los alcances del II Informe de AMLO. Para acceder debe ingresar a la conversación identificada con el número 303-343-5271, y la contraseña es 655586062.

Los acontecimientos históricos nos recuerdan la evolución del humano, nos hacen ver que hoy las batallas son distintas; hemos transitado del combate cuerpo a cuerpo al debate y al acuerdo; de las municiones a la persuasión con palabras; de las conquistas armadas al contraste de opiniones; de la violencia al diálogo; de la intolerancia a la inclusión. Así, la institucionalización de la política mexicana nos permitió transitar del enfrentamiento armado a la contraposición de ideas.

Sin embargo, los gobiernos de MORENA culpan de sus errores, omisiones y malos manejos a la pandemia. Como Pilatos, cobardemente se lavan las manos con el COVID-19 e, incluso, lo utilizan como pretexto para justificar su ineficiencia. Transfieren sus responsabilidades a las y los ciudadanos, a las redes o de plano al “aire”, poniendo su cara de “yo no fui”.

Por ello, es preciso que, además de la conmemoración de importantes acontecimientos de nuestro pasado, los cuales significaron sacrificio, lealtad y anhelo de una mejor vida, el presidente López Obrador y el gobernador Bonilla Valdez caractericen sus gobiernos con esos valores que nos fueron legados con sudor y muerte: diálogo, acuerdos, tolerancia, inclusión, acuerdo, confianza, liderazgo, respeto. Porque, sin temor a equivocarme, en este momento la política exige la participación de mujeres y hombres honorables; para que así, el próximo gobernador de Baja California se escriba con H, de honor.

 Post Scriptum. Como este año tendremos un Grito muy silencioso, aprovecharé para aventarme mi propia arenga: ¡Vivan los héroes que nos dieron patria y libertad! ¡Viva Hidalgo! ¡Viva Allende! ¡Viva Josefa Ortiz! ¡Vivan Aldama, Jiménez y Abasolo! ¡Viva López Rayón! ¡Vivan Vicario y Quintana Roo! ¡Viva Morelos! ¡Vivan Galeana y Matamoros! ¡Viva Guerrero! ¡Viva Tijuana! ¡Viva Baja California! ¡Viva México! ¡Viva México! ¡Viva México!

* El autor cuenta con una Maestría en Comunicación Estratégica y es doctorando en Derecho Electoral.

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