El mercado industrial de bienes raíces en México podría sobresalir como un refugio relativamente seguro para los inversionistas, pese al profundo desplome que verá la economía local en el 2020 por el nuevo coronavirus, estimó el miércoles el banco británico Barclays.
El sector, en general, goza de buenas perspectivas incluso hacia el 2021 y la bonanza podría reafirmarse una vez que entre en vigor el renovado Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) de libre comercio, agregó la institución privada.
«Estamos muy positivos en torno a bienes raíces industriales, la actividad en general deberá seguir un buen curso con el T-MEC entrando en vigor el próximo 1 de julio», indicó Barclays en un reporte a sus clientes.
«Varias empresas van a revalorar el concepto riesgo-beneficio sobre el mantenimiento de sus cadenas globales de proveeduría, así que esperamos que algunas de ellas opten por su reubicación», añadió.
De forma adicional, el comercio electrónico podría acelerar la demanda por espacios logísticos, consideró la institución británica.
En el caso de los inmuebles para oficinas, Barclays apuntó que el acercamiento inversor debería ser más cauteloso, ya que aun es muy temprano para adelantar algo concluyente.
«Reconocemos, no obstante, que la aguda caída del Producto Interno Bruto de México tendrá un impacto en el desempleo, el consumo y eventualmente en los bienes raíces», añadió el documento.
La economía mexicana, la segunda mayor de América Latina después de Brasil, podría desplomarse este año alrededor de un 8,0 por ciento por los efectos de la pandemia COVID-19, de acuerdo con las estimaciones más recientes de los analistas consultados por el central Banco de México (Banxico).
Hacia el 2021, los expertos proyectan una recuperación del 2,2 por ciento para el PIB mexicano.