Graciela Márquez Colín, secretaria de Economía (SE), descarta que el incremento del salario mínimo de 87.64 pesos en varios municipios de la frontera norte a partir del 2019 no provocará un alza de precios, gracias a la reducción de los impuestos.
“El aumento en el salario mínimo en la frontera norte –y esto hay que aclararlo y decirlo muy enfáticamente- no tendrá implicaciones inflacionarias”, dijo la economista durante el anuncio de la nueva estrategia salarial de Andrés Manuel López Obrador.
El impacto en los costos de producción será relativamente pequeño y compensado con las reducciones propuestas en las tasas impositivas que también aplicarán en esta zona del país, manifestó la funcionaria.
A partir de enero de 2018, el salario mínimo será de 102.68 pesos por día en la zona del centro y sur y de 176.72 pesos por día para la frontera norte.
“El aumento al salario mínimo tendrá fundamentalmente efectos positivos en la capacidad adquisitiva de los trabajadores mexicanos, y prácticamente efectos nulos en otras dimensiones como la inflación o el desempleo”, declaró.