Hoy la tecnología va a pasos agigantados, tal es así que se ha involucrado en nuestras vidas: contamos con televisores, refrigeradores, teléfonos «inteligentes», que cuentan con un sistema de conexión de red que nos permiten hacer varias funciones y en cuanto a celulares cuentan con diversas funciones similares a una computadora, música digital, en los autos nos podemos dirigir a un lugar pro medio de un sistema GPS para ver como está la situación vial y así muchas comodidades que han ido cambiando la forma en que viviamos.
A pesar de todos estos adelantos, hay algo que han dañado a muchos y es la la falta de comunicación social que habíamos tenido antes, hoy lo que se ha puesto de moda son los famosos chats dentro de los celulares, los cuales han provocado un descontrol de lo que antes llamabamos conversaciones y que hoy solamente se hace a través de un teclado llevando a esto a tener problemas matrimoniales y sociales o también faltas de moralidad al momento de exhibir fotos no adecuadas.
Los sistemas modernos de comunicación mencionando todo lo anterior han convertido a la sociedad en robots, es decir están aferrados a un sistema de programación de la tecnología que sin ella se sentiría que le faltara algo y lo hemos convertido en el llamado concepto «Bluetoothuman»
Es importante que las familias de algún modo pongan un límite al uso de la tecnología, es decir que si se pudiera usar a ciertas horas para que haya una mejor convivencia familiar y social.
Lo importante de la tecnología es poder facilitar las cosas, pero de alguna manera la solución no son de los fabricantes de la misma, sino de nosotros mismos, pero desafortundamente cuando vienen todos estos inventos, el ser humano es muy curioso y a veces compra cosas que verdaderamente no necesita, lo que tiene que hacer es saber que es lo que realmente necesita.
Nos facilitan el trabajo, nos ayudan a recuperar viejas amistades o mantener el contacto con nuestros familiares, podemos hacer la compra de forma cómoda y rápida, pero nos pueden causar estrés, ansiedad, insomnio, dependencia o incluso adicción si no sabemos utilizarlas adecuadamente
Las diversas aplicaciones de mensajería instantánea, el correo electrónico, los programas de redes sociales o los servicios de dating han dado un giro al modo en el que entablamos una amistad, trabajamos, mantenemos a nuestros amigos, comenzamos una relación o la rompemos con el famoso “bloqueo”
Por esa razón debemos establecer un equilibrio entre la tecnología y relaciones sociales, ya que si estamos metidos en este juego, nuestra realidad se va distorsionando y estamos solamente sumergidos dentro del universo tecnológico.