He recorrido el mundo con los maravilloso hoteles Small Luxury Hotels of the World, enamorándome una y otra vez de sus pequeños detalles y personalidades únicas que los vuelven lo que son.
Cada uno de los 520 pequeños hoteles independientes que forman parte de Small Luxury Hotels tienen una cosa en común: la excelencia. Han seleccionado cuidadosamente cada uno de ellos para celebrar su individualidad, peculiaridades y carácter, siempre asegurándose de que sean de alto estándar, desde hoteles que parecieran palacios hasta aventura en una isla desierta.
Una de las joyas de esta increíble cartera de hoteles es Quinta das Lagrimas, es un retiro de paz y tranquilidad situado en un palacio del siglo XVIII en el corazón de Coimbra.
Coimbra fue la capital medieval de Portugal durante más de cien años y sede de la universidad más grande del país durante los últimos cinco siglos, Coimbra carga con dignidad el peso de la historia portuguesa. Su atmosférico, hermoso núcleo histórico es un collage multicolor de edificios que abarcan casi un milenio.
Entre las muchas estructuras arqueológicas que datan de la época romana, cuando Coimbra fue el asentamiento de Aeminium, están su bien conservado acueducto y cryptoporticus. De igual manera, los edificios de la época en que Coimbra era la capital de Portugal (de 1131 a 1255) siguen en pie.
Durante la Baja Edad Media, con su declive como centro político del Reino de Portugal, Coimbra comenzó a convertirse en un importante centro cultural. Esto fue en gran parte ayudado por el establecimiento de la Universidad de Coimbra en 1290, la más antigua institución académica en el mundo de habla portuguesa.
En esta increíble ciudad histórica, nos encontramos con el increíble hotel histórico de Quinta das Lágrimas, un palacio una vez habitado por reyes y emperadores, fue restaurado en la primavera de 2016 con toda su gloria y ahora es un hotel monumental que honra la historia de amor entre la hermosa mujer Inês de Castro y el príncipe Pedro.
Quinta das Lágrimas Palace tiene un aire indudablemente romántico. La fachada amarilla y blanca del hotel da una majestuosa impresión. Con magníficos jardines llenos de árboles raros, la fuente que se dice nacer de las lágrimas de la fatídica Inês de Castro, asesinada por su amor ilícito, y las habitaciones bellamente decoradas en todo, esta propiedad es encantadora y totalmente única.
El origen de la finca que hoy en día es Quinta das Lagrimas es incierto. Se sabe que fue un campo de caza para la familia real portuguesa y que más tarde perteneció a la Universidad de Coimbra y posteriormente a una orden religiosa. Fue adquirida por la familia Osório Cabral de Castro en 1730, bajo cuya orden se construyó el palacio. En 1879 una gran parte del palacio se perdió durante un incendio. Fue reconstruido a finales del siglo XIX, en un estilo diferente al del original.