El presidente del Centro de Estudios Económicos de Baja California, Luis Roberto Valero Berrospe, afirmó que el poder adquisitivo del salario en la entidad “es una ilusión monetaria”, al señalar que los municipios bajacalifornianos han perdido terreno en el ingreso del sector formal a nivel nacional, “mientras la inflación y la ausencia de una política de mejora salarial mantienen castigadas las percepciones laborales”.
Indicó que de acuerdo al IMSS, el Salario Promedio de Cotización de Mexicali ubica al municipio en el lugar 97, con una diferencia muy grande frente a los líderes nacionales que pagan más de mil pesos diarios contra 611.70 de la capital; Tijuana se ubica en el puesto 109, con un sueldo de 585.55 pesos y San Quintín, el municipio más pobre del Estado, ocupa el lugar 806 “con un salario de vergüenza: 351.10 pesos por día”.
La tabla del Salario Promedio de Cotización del IMSS a nivel nacional la encabeza el municipio veracruzano de Alto Lucero, que con apenas 28 mil habitantes, mantiene un sueldo de 1,606.96 pesos diarios, y le sigue en el segundo lugar Chinipas, Chihuahua, con 1,203.06 pesos, y en tercer lugar, Coyame, también en Chihuahua, con 1,192.93 pesos diarios.
Valero Berrospe señaló que para medir el poder adquisitivo y saber realmente cuantos se requiere para cubrir las necesidades, se debe empezar por medir el salario por hora trabajada y en Baja California el Salario Mínimo es de 39.05 pesos la hora, y dado que el 50% de los ocupados formales ganan solo hasta 2 Salarios Mínimos, perciben 78 pesos por hora; igual se puede dividir el Salario Promedio de Cotización del IMSS, especificó.
Añadió que así, por ejemplo, una cartera de 12 huevos cuesta en promedio una hora con 10 minutos de trabajo, una Coca Cola requiere de casi media hora, un paquete de carne deshebrada requiere algo de más de cuatro horas y si el trabajador quiere darse un gusto con el salmón, debe invertir 7.5 horas de trabajo, “y del costo de la energía eléctrica en Mexicali, mejor ni hablar”.
También indicó que entre septiembre del 2022 y enero de 2023 la Industria Maquiladora de Baja California redujo el número de empleados en 16 mil 222, y destacó que frente al discurso de que les faltan trabajadores, no es arriesgado pensar que están renunciando. El SPCIMSS, subrayó, muestra que la industria de transformación está pagando menos de 2 Salarios Mínimos.
Y por si lo anterior fuera poco, dijo Roberto Valero, la Secretaría del Trabajo publicó información que muestra que al arrancar el año los salarios contractuales reales en Baja California, es decir, descontando la inflación, redujeron su poder adquisitivo en 3.46 por ciento anual.
Apuntó que para Baja California, el alza de 254% a los Salarios Mínimos entre 2018 y 2023, lejos de beneficiar ha sido una pesadilla para los trabajadores, pues quienes ganan esa cifra crecieron en 295% entre 2018 y 2022; el alza salarial en beneficio de los pocos de abajo se dio en detrimento de los de mayor ingreso empobreciendo a toda la población trabajadora.
Remarcó que es crítica la situación de los ingresos de los trabajadores en la entidad y deja en claro que no se está entendiendo que si no hay consumo, no hay recuperación económica, y que incluso para las dádivas que se reparten, se necesita que la población trabajadora que paga impuestos esté bien remunerada, porque a final de cuentas — reiteró— “las cifras de salarios son solamente una ilusión monetaria”.