Durante los primeros cinco meses del año, el sector de la construcción tuvo un descenso en su actividad, lo cual lo aleja de la recuperación total tras el bache de la pandemia, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras (ENEC) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Este 24 de julio, el Inegi presentó los resultados de la ENEC a mayo de este año, donde se destaca que el valor de la producción que generaron las empresas constructoras disminuyó 0.8% en términos reales, respecto a un mes previo, para así confirmar el quinto mes consecutivo en caída.
Respecto a los tres subindicadores que monitorea el Inegi, todos tuvieron crecimientos marginales en su comparación mensual. Según la ENEC, el personal ocupado total aumentó 0.9% respecto al mes previo y las horas trabajadas crecieron 0.7 por ciento.
Por su parte, las remuneraciones medias salariales crecieron 0.7%, en comparación con abril pasado, con crecimiento en salarios pagados a obreros, de 1.8% mensual, y una caída de 0.5% respecto a sueldos pagados a empleados administrativos, contables y de dirección.
¿Recuperación lejana?
En su comparación anual, los resultados del valor de la producción arrojan crecimientos importantes; sin embargo, en los primeros meses del 2023 todavía se arrastraba el efecto del impacto de la pandemia en esta industria.
De acuerdo con la ENEC, durante mayo pasado el valor de la producción de la construcción creció 4.8% respecto al mismo mes del 2023; sin embargo, dos de los tres subindicadores de este índice, registraron disminuciones comparadas con el año pasado.
Por ejemplo, el valor ocupado total, registró un descenso de 0.6% en su comparación anual, mientras que las horas trabajadas disminuyeron 1.4 por ciento. Por su parte, las remuneraciones medias reales crecieron en mayo pasado 5.9%, en su medición anual.
Durante mayo pasado, el sector estuvo compuesto por la construcción de obras de ingeniería civil (46.7%), la edificación (42.4%) y los trabajos especializados para la construcción (10.8%).
Asimismo, la actividad de la construcción se concentró en Quintana Roo (11%), Nuevo León (10.1%), Jalisco (5.9%), Campeche (5.2%), Chihuahua (4.6%), Baja California (4.5%) y Ciudad de México (4.1%). La actividad en estas regiones se da por las obras del gobierno federal, como el caso de la refinería de Dos Bocas, así como el impulso del nearshoring.