México ha alcanzado niveles récord de consumo eléctrico, superando en ocasiones la capacidad de generación y transmisión de su infraestructura de servicios públicos. Este será parte de los retos energéticos a afrontar hacia el siguiente sexenio
Datos oficiales revelan que el operador de la red eléctrica, el Centro Nacional de Control de Energía (CENACE), registró un consumo de 51,595 megavatios al final de la tarde del lunes, una cifra sin precedentes para el país.
Este aumento en la demanda de electricidad, impulsado por el calor abrasador, incrementa la probabilidad de cortes de energía. En especial, en un sistema ya debilitado por una infraestructura envejecida y esfuerzos insuficientes para modernizarse e invertir en fuentes renovables. La Comisión Federal de Electricidad (CFE), responsable del 99.47% de la generación eléctrica, junto con CENACE, enfrenta enormes desafíos para satisfacer las necesidades energéticas del país.
Se suma problema de escasez de agua
Paul Alejandro Sánchez, consultor energético independiente, comenta que “llevan muchos años en que la demanda está creciendo, pero hubo una subinversión en la generación y la transmisión de electricidad. El problema no es la demanda promedio, es cuando alcanza estos niveles extremos”, esto según información de Reuters. Asimismo, el calor ha disparado el consumo tanto en hogares como en industrias, complicando aún más el panorama energético. Además, las centrales hidroeléctricas han visto mermada su capacidad por la escasez de agua.
Durante los últimos seis años, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha priorizado a la CFE, enfocándose en la generación de electricidad a través de combustóleo. Una medida que ha frenado el crecimiento de generadores privados y proyectos de energía renovable. Sin embargo, con la elección presidencial a la vuelta de la esquina, los tres candidatos han prometido centrarse en las energías renovables para abordar esta crisis energética.
Silla presidencial viene con retos energéticos
Claudia Sheinbaum, la candidata de Morena y líder en las encuestas, junto con Xóchitl Gálvez, su rival más cercana del bloque opositor, han subrayado la necesidad de aprovechar el potencial solar, eólico e hídrico de México. Ambas candidatas han puesto énfasis en la sostenibilidad como una prioridad en sus agendas energéticas.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) prevé que las próximas olas de calor establecerán nuevos récords en diversos estados. Lo que resultará en un aumento de la demanda energética, mala calidad del aire e incendios forestales. Este escenario subraya la urgencia de modernizar la infraestructura energética y adoptar fuentes de energía más sostenibles.
El próximo presidente de México enfrentará el reto crucial de equilibrar la creciente demanda energética con una infraestructura que necesita modernización urgente. La transición hacia energías renovables no solo es vital para enfrentar la crisis actual, sino también para garantizar un futuro energético sostenible y seguro para el país.