A diferencia del sexenio anterior, poco se habla de la corrupción gubernamental en los medios de comunicación. ¿Será porque hay menos casos que en el pasado o será que los medios no quieren entrarle al tema para no despertar el enojo de Palacio Nacional?
Lo que hay que reconocer es que la organización Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad sigue realizando la extraordinaria labor de desenmascarar posibles casos de corrupción, tal y como lo hizo el sexenio pasado.
Una nueva investigación de Iván Alamillo demuestra cómo un amigo de uno de los hijos del Presidente, Andrés Manuel López Beltrán, popularmente conocido como Andy, se ha beneficiado de contratos adjudicados de manera directa para vender medicinas a los gobiernos morenistas de Quintana Roo y Tabasco (el reporte completo se puede leer en https://contralacorrupcion.mx/del-insabi-a-gobiernos-morenistas-asi-bene…).
A continuación, gloso los hallazgos de esta investigación. Andy es amigo de Jorge Amílcar Olán Aparicio, propietario de una empresa de reciente creación: Romedic. A pesar de que este negocio se encuentra boletinado por la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) por ser un distribuidor de medicamentos que incumple con la regulación sanitaria, los gobiernos morenistas de Quintana Roo y Tabasco le otorgaron contratos por más de 490 millones de pesos, en adjudicación directa, para la compra de medicamentos y equipo de curación.
Andy y Olán Aparicio también son amigos y mantienen relaciones de negocios con César Mauricio Calderón Alipi, hermano de Alejandro Antonio Calderón Alipi, actual director general del IMSS-Bienestar y excoordinador nacional de Abastecimiento y Distribución de Medicamentos del Insabi, dependencia de donde salieron los recursos federales que terminaron beneficiando a Romedic.
Romedic declaró al gobierno quintanarroense que su dirección se encontraba en el número 238 de Avenida Universidad, en la colonia El Recreo, en Villahermosa, Tabasco. Ahí acudió el personal de la Cofepris durante su visita de verificación. Sin embargo, en ese lugar se encuentra una tienda Euroceramic y una gasolinería.
Perdón, pero sí suena muy sospechoso que un amigo de Andy haya creado una nueva empresa distribuidora de medicinas, con domicilio en un comercio que vende revestimientos cerámicos, y de pronto haya conseguido dos jugosos contratos de los gobiernos de Mara Lezama y Adán Augusto López pagados por una institución federal que opera otro amigo de Andy.
En el sitio de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad pueden observarse todos los documentos de estas transacciones, las pruebas de la amistad del hijo del Presidente con los personajes mencionados y la fotografía del domicilio de Romedic, donde hay una tienda Euroceramic.
Al día siguiente de que se dio a conocer la investigación, el Presidente negó que Andy tenga que ver con este asunto: “¿Qué tiene que ver mi hijo? A ver, díganme ustedes. O sea, si demostraran que él es socio de la empresa, que hay un escrito en donde él le pide al gobierno de Quintana Roo que le den el contrato, él recomienda o así como escucha Claudio X. González y sus secuaces por teléfono, porque hacen espionaje, que den a conocer la grabación en donde Andrés le pide el favor a un funcionario para que le entreguen el contrato. Nada. Es nada más porque, supuestamente, es amigo del que recibe el contrato”.
Y remató el Presidente: “Ni amiguismo ni influyentismo ni nepotismo ni corrupción, ninguna de esas lacras de la política. Por eso somos distintos y por eso no han podido ni podrán”.
¿Es suficiente esta explicación para darle carpetazo a este nuevo caso de posible corrupción del gobierno actual?
Pues parece que sí porque, salvo Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad y Latinus, el medio donde se dio a conocer la investigación, prácticamente nadie está hablando de este tema.
Si en algo es diferente este gobierno a los anteriores es que no se arman grandes escándalos por posibles casos de corrupción. Tan sólo imaginemos, por un momento, que algo similar se hubiera revelado en los sexenios pasados de Peña o de Calderón. Amigos de los hijos del Presidente obteniendo contratos multimillonarios por medio de adjudicaciones directas a una empresa de reciente creación sin experiencia alguna en la distribución de medicinas.
¿Qué estaría diciendo el opositor López Obrador al respecto? ¿Se quedaría satisfecho con la explicación de que el hijo del Presidente no es socio de la empresa o que no existen pruebas de su involucramiento directo?
X: @leozuckermann