El Museo de Arte de San Diego presenta O’Keeffe y Moore, una exposición innovadora que une el trabajo de estos dos artistas majestuosos por primera vez, la cual estará expuesta al público del 13 de mayo al 27 de agosto del 2023, antes de viajar al Museo de Alburquerque en Nuevo México, y al Museo de Bellas Artes de Montreal en Canadá. La exposición recrea los estudios de Georgia O’Keeffe y Henry Moore con sus objetos, herramientas y muebles originales encontrados. Los visitantes pueden experimentar las prácticas de trabajo de los dos artistas para entender como las formas naturales de los cráneos y huesos de animales, las conchas marinas en espiral, la madera flotante nudosa, y las piedras entrelazadas y multidimensionales, inspiraron la mayoría de sus creaciones más icónicas, y ver expuestas más de 120 obras de arte de los dos artistas en cinco galerías del Museo.
Aunque vivían con un océano de por medio, O’Keeffe y Moore fueron pioneros y compartieron una visión y un enfoque coherente del Modernismo. Mientras que algunos otros artistas modernistas también utilizaron formas naturales como un camino hacia la abstracción, ningún otro acumuló colecciones tan vastas de objetos encontrados y centró su arte en este aspecto fundamental.
La exposición, que incluye obras significativas del Museo Georgia O’Keeffe y la Fundación Henry Moore, así como de alrededor de 30 museos, instituciones y entidades crediticias, comienza con sus estudios de la vida natural, los experimentos con el surrealismo de ambos artistas, incorporando conceptos como yuxtaposiciones de formas improbables, ambigüedad de escalas y metamorfosis.
Le siguen las recreaciones de los estudios de los artistas con los contenidos originales del estudio Ghost Ranch de O’Keeffe en las colinas de Nuevo México y el estudio Bourne Maquette de Moore en Perry Green, una pequeña aldea rodeada de campos de ovejas en Hertfordshire, Inglaterra. Además de los cuernos de carnero, las conchas marinas, las piedras de rio y los cráneos de animales de la colección de O’Keeffe, se incluyen en la recreación del estudio de O’Keeffe su caballete original, pinturas sin terminar, pinceles que ella misma recortó, sus pasteles hechos a mano, y tarjetas de pinturas que creó para documentar y recrear cada color. En el estudio de Moore, que él llamo su “biblioteca de formas naturales”, los artículos exhibidos incluyen huesos de vaca y oveja de los campos locales, así como el cráneo de un rinoceronte, el cuello de una jirafa y una vértebra de ballena Minke, objetos raros que le fueron entregados por su amigo, el zoólogo Julián Huxley. Intercalados con los innumerables objetos encontrados se incluyen maquetas de yeso de figuras humanas en diversas etapas de finalización: objetos de la naturaleza y del
cuerpo humano entrelazados que subrayan la relación intrínseca de todas las cosas vivas.
Después de las recreaciones de sus estudios, la exposición se abre a una serie de galerías que observan de cerca los diferentes tipos de formas naturales como huesos, piedras, conchas, flores y formas internas/externas, y paisajes de forma.
Ambos artistas levantaron fragmentos de huesos contra el cielo e imaginaron sus obras de arte con aberturas que enmarcaban el paisaje; ambos tenían intereses arqueológicos y en los espacios entre grandes bloques de piedra; ambos investigaron la relación entre una forma interna y su elemento protector o externo. Para O’Keeffe, esta exploración resultó en más de cuatro décadas de refutar las interpretaciones de sus pinturas florales basadas en su género. La exposición culmina con paisajes de ambos artistas que evocan formas multidimensionales y repetitivas con rupturas prominentes del espacio negativo.
Sobre todo, el terreno común entre estos dos artistas se puede encontrar en la inspiración que cada uno tomo de la naturaleza y su asociación duradera con los paisajes que fueron una parte esencial del trabajo de su vida. Moore se mudó de Londres a los verdes campos de ovejas de Hertfordshire, Inglaterra, durante el bombardeo de 1940, mientras que O’Keeffe dejó el bullicio de Nueva York para establecerse permanentemente en Nuevo México en 1949, quedando indiscutiblemente ligada al terreno desértico. Esta exposición se ha conformado a partir de colecciones nacionales e internacionales, incluyendo obras maestras desde lo íntimo hasta la gran escala, y en materiales que van desde pasteles y pinturas hasta bronce, así como travertino, plomo, madera de olmo, lignum vitae e incluso estalactitas.
“Estamos emocionados de presentar por primera vez las sorprendentes similitudes y yuxtaposición de Georgia O’Keeffe y Henry Moore, dos artistas de renombre internacional”, dijo Roxana Velásquez, directora ejecutiva del Museo de Arte de San Diego. “La creación de una exposición tan innovadora fue un proceso gradual de principio a fin, y estamos ansiosos por que los visitantes experimenten y comparen las obras de estos dos artistas mientras defienden sus carreras y contribuciones al desarrollo artístico del siglo XX”.
En 1986 fallecieron ambos iconos modernistas, marcando el final de una era artística decisiva. Los artistas se conocieron en 1946 durante la retrospectiva de Moore en el Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York. O’Keeffe tuvo su retrospectiva allí, la primera de una mujer artista en el MoMA, solo unos meses antes.
Esta exposición incluirá un simposio de académicos reconocidos internacionalmente, una cena de celebración de apertura y otra programación relacionada.
La exposición fue curada por Anita Feldman, directora adjunta de Asuntos Curatoriales y Educación del Museo de Arte de San Diego, y reconocida experta en obras de Henry Moore, que pasó casi 20 años con la Fundación Henry Moore como curadora y miembro de la Fundación Henry Moore en el Comité de Autenticación. La exposición viajará próximamente al Museo de Alburquerque y al Museo de Bellas Artes de Montreal y estará acompañada por un catálogo bellamente ilustrado con investigaciones originales y contribuciones de destacados académicos internacionales. Debido a la logística y al personal necesario para esta exposición especial, hay un cargo adicional de $10 para los no miembros del Museo.
Esta exposición fue posible gracias a los fondos aportados por Lisa and Charles Hellerich, la Fundación Wyeth para el Arte Americano, el Fondo Nacional para las Artes, Lani y Joe Curtis, Eileen y Robert Hunt, y el Banco PNC. Brindaron apoyo adicional la Comisión para las Artes y la Cultura de la Ciudad de San Diego y los miembros del Museo de Arte de San Diego.
Para obtener más información sobre el Museo de Arte de San Diego y la compra de boletos, visite www.SDMArt.org