El presidente del Centro de Estudios Económicos de Baja California, Luis Roberto Valero Berrospe, dijo que el anuncio oficial en el sentido de que al primer bimestre del 2023 aumentó la generación de empleos en Baja California, “es un espejismo que encubre una realidad preocupante”.
Especificó que en efecto, el empleo formal creció en febrero, de acuerdo a las cifras del IMSS, “pero no se dice que el registro total de un millón 34 mil 668 trabajadores al primer bimestre del año, está por debajo del millón 39 mil 247 que se tuvo en noviembre”.
La diferencia, indicó, se debe a que en diciembre se recortaron 28 mil 16 puestos de trabajo, de tal manera que aunque en enero sumaron 17,707 nuevas plazas y en febrero 5,730, “el total se encuentra 4 mil 579 puestos por debajo de la cifra de noviembre, e incluso son menos que en octubre!”.
El presidente del Centro de Estudios Económicos de la entidad manifestó que por municipios, durante febrero Ensenada encabezó la generación de empleos en la entidad, con 3 mil 143 plazas; sin embargo, se trata de un comportamiento estacional ya que la mayor parte, el 66%, fueron eventuales del campo, con 2 mil 251 puestos.
Detrás de Ensenada se colocó Mexicali con una generación de mil 61 fuentes de trabajo, que resultaron de la contracción de 2 mil 34 estacionales del campo y el aumento de 3 mil 213 permanentes urbanos. En tercer lugar se ubicó Tijuana con mil 48, de los cuales 541 fueron eventuales urbanos y 521 permanentes urbanos. Luego se ubicó Rosarito con 273, San Quintín con 6 y Tecate, que perdió 71.
Valero Berrospe puntualizó también que la miseria salarial que esconden los datos, no tiene precedentes en Baja California, pues la precariedad salarial del sector formal en la entidad escaló a niveles “escandalosamente preocupantes” cuando los ocupados adscritos al IMSS que tienen un ingreso de hasta 2 Salarios Mínimos se dispararon hasta los 513 mil 570 trabajadores en febrero.
El registro — dijo— marcó un nuevo récord en la entidad y de paso elevó a 50% la participación de este grupo de asalariados en el total, la mitad de la ocupación formal; se trata, subrayó, de un fenómeno nunca visto en un estado que por muchos años (en la década de los 90s) presumió que este sector de trabajadores apenas si llegaba al 3% del total. Mientras, los de más de 5 Salarios Mínimos se hunden a mínimos históricos.
Por otra parte, el economista destacó que a nivel estatal también hay menos empresas “pero la situación de Tijuana es preocupante”. En el municipio más poblado del estado se redujo en 460 el número total de empresas formales en un periodo de cuatro meses.
Agregó que la cifra, que resulta del saldo de altas y bajas de empresas formales, indica que en noviembre estaban registradas 20 mil 558 unidades, mientras que para febrero el registro se redujo a 20 mil 98, lo que resulta en 460 menos. El saldo para BC es de 334 empresas menos en febrero con respecto a enero. Sólo Mexicali sumó 55 nuevas unidades económicas, dijo.
Informó que entre febrero del 2022 y febrero del 2023, en Baja California causaron baja en el IMSS 10 mil 515 empresas, y durante febrero de este año el cierre de establecimientos se concentró en los sectores micro y pequeño. Detalló que las empresas con 1 trabajador concentraron el 26% de los cierres y las de 2 a 5 empleados el 54%, y juntas totalizaron el 80% de los cierres, por lo que ante la evidencia de la estadística oficial, “los espejismos se desvanecen”.