El gobierno de Estados Unidos anunció este miércoles que apelará un fallo judicial que levantaría las restricciones al asilo que se han convertido en una pieza fundamental de la vigilancia fronteriza en los últimos años.
Las restricciones entraron en vigor en marzo de 2020 con el argumento de prevenir la propagación del covid-19, negando así a los migrantes el derecho a solicitar asilo consagrado en las leyes estadunidenses e internacionales.
El Departamento de Seguridad Nacional señaló que interpondrá una apelación ante el Tribunal Federal de Apelaciones del Distrito de Columbia para impugnar el fallo emitido en noviembre por el juez federal de distrito Emmet Sullivan que ordenó al gobierno del presidente Joe Biden retirar las restricciones al asilo.
Tales restricciones fueron implementadas por el gobierno del expresidente Donald Trump al inicio de la pandemia de covid-19. La práctica fue autorizada por el Título 42 de una ley más amplia de 1944 que cubre la salud pública y que ha sido utilizada para realizar más de 2.4 millones de expulsiones de migrantes.
La apelación podría echar por tierra la fecha límite del 21 de diciembre fijada por Sullivan para que su orden entrará en vigor. Sullivan ha señalado que la expulsión de migrantes bajo el Título 42 es “arbitraria y superficial”.
Y los grupos defensores de derechos de migrantes han alegado que el uso del Título 42 perjudica injustamente a la gente que huye de la persecución y que la pandemia fue un pretexto utilizado por el gobierno de Trump para reducir la inmigración.
“La decisión del gobierno de Biden de apelar no es sorprendente dada su enérgica defensa de la política en los últimos dos años”, señaló en un correo electrónico Lee Gelernt, abogado para la Unión Americana de Libertades Civiles y principal abogado del litigio de la organización contra el Título 42.
Una coalición de estados de tendencia conservadora quiere mantener en vigor la norma de salud pública implementada durante el gobierno de Trump que permite que muchos solicitantes de asilo sean enviados de vuelta a la frontera sur de Estados Unidos.
Las restricciones se han aplicado de forma desigual por nacionalidades, recayendo en gran medida sobre los migrantes de Guatemala, Honduras y El Salvador —así como sobre los mexicanos— porque México los admite cuando son expulsados por Estados Unidos. El mes pasado, México empezó a aceptar también a los venezolanos que son expulsados de Estados Unidos en virtud del Título 42, causando una fuerte disminución en la llegada de venezolanos a la frontera sur estadunidense.
Las restricciones al asilo han sido utilizadas por el gobierno de Biden para expulsar a familias de migrantes y adultos que viajan solos, aunque no para los niños que llegaron sin compañía de un adulto.