Cada año, el día 17 de mayo, es un día especial para el tema sostenible en la UNESCO, pues este refiere al Día Mundial del Reciclaje, punto clave para lograr soluciones al nivel del reto, ya que se busca desarrollar de manera integral un pensamiento a la par de acciones de economía circular, se dice fácil, pero quisiera dejar algunas ideas sobre la mesa para empezar con las alternativas que contribuyen en esta gran tarea, siendo desde tu casa, empleo, empresa o sector, y así recordar a todos los ciudadanos la propuesta de hábitos de consumo: reducir, reutilizar y reciclar. Así mismo, esta fecha es clave para crear conciencia a todos sobre la importancia de tratar los residuos de forma responsable, y de esa manera trabajar juntos a favor de nuestro medio ambiente, unificarnos para poner al planeta en primer lugar y cambiar la mentalidad y estrategia de los gobiernos, las empresas, las comunidades y personas de todo el mundo, y así cambiar percepciones y ver a los materiales reciclables como una oportunidad de recurso y no como desperdicio.
La generación de residuos prácticamente se ha duplicado en los últimos años, y una forma básica para atacar el problema es reducir la cantidad de desechos, esto por medio del reciclaje. Afortunadamente cada año la popularidad y relevancia de esta fecha va creciendo, y numerosas organizaciones, compañías y ONG´s han creado campañas de sensibilización e información, pero sobre todo planes, programas, y proyectos relacionados con el reciclaje de diferentes tipos de residuos.
La base son los seis recursos primarios que tiene la tierra: agua, aire, petróleo, gas natural, carbón y minerales; por lo que el reciclaje es una parte clave que ayuda a proteger dichos recursos, y cómo lo haríamos, pues accionando en una economía circular. Según datos del Global Recycling Foundation cada año, el reciclado ahorra más de 700 millones de toneladas en emisiones de CO2, y se prevé que aumente a mil millones de toneladas para 2030. No hay duda de que el reciclaje está en la primera línea de prioridades para salvar el futuro de nuestra planeta y humanidad, pero debemos ser más ambiciosos y establecer metas mucho más retadoras.
El reciclaje es un tema que debe abordarse bajo una óptica del bien común, incluyéndolo en la agenda global para trabajar entre naciones y ciudadanos, fijando la atención en la importancia de los recursos y plantear el objetivo de darle el valor real reutilizando al máximo potencial.
Si bien el punto focal es el reciclaje, este día está fundamentado en la regla de las tres erres:
Reducir: planear bien las compras ayuda a tratar de reducir el consumo de los productos directos, es decir, consumir todo lo que se compra, ya que esto tiene una relación directa con los desperdicios.
Reutilizar: darle el mayor uso posible a cosas que ya utilizaste en lugar de tirarlas. Por ejemplo, bolsas, cajas de cartón, telas, etc., de esa manera logramos más vueltas y menos residuos.
Reciclar: reinsertar el material de desecho de numerosas actividades industriales, empresariales o del consumo diario en la cadena productiva. Si reducir y reutilizar ya no son la opción, reciclar sí lo será. Casi todo lo que compramos puede reciclarse: aluminio, vidrio, plástico, cartón, madera y textiles.
Los principales beneficios de reciclar no solo recaen en la reducción del volumen de residuos, sino que también disminuye la contaminación en suelo, aire y agua, preservando así los recursos naturales y a la par ahorrar energía.
Por parte de las empresas se comienza a ver compromisos más allá de la neutralidad en carbono, pues muchas de ellas anunciaron aspiraciones de lograr un futuro con emisiones de carbono negativas, sin embargo, se requiere de la escala de más sectores y países para lograr las acciones que demanda el reto, ya que depende 100% de nosotros.
Cabe resaltar que México sigue siendo a nivel de América Latina de los países que tienen los porcentajes más altos en reciclaje de PET. Tenemos ya negocios base en máquinas recicladoras, en las que los ciudadanos pueden depositar no solo envases de PET, sino que también latas de aluminio, dando a cambio puntos para viajes en transporte colectivo o Ecobicis. Es así como sigue la lucha contra el cambio climático poniendo a la tecnología a nuestro favor pues, dichas máquinas operan como un bote de basura inteligente, el cual capta residuos sólidos urbanos, contribuyendo no solo a reducir emisiones de CO2, sino también reduciendo cantidades de basura, subsidiando productos y servicios al alcance de la población. Todo ello sin olvidar que México sigue haciendo inversiones interesantes en la industria del reciclado y las mismas plantas con el uso de altos porcentajes, de energía proveniente de energía renovable.
Pese a todas las acciones emitidas, es necesaria una transición integral a una economía circular mundial, que conlleve la integración de intelecto, innovación, recursos económicos y humanos bajo un enfoque multisectorial con un mismo objetivo. Nadie más tiene los fondos para impulsar la investigación que necesitamos que el sector público y privado de manera coordinada, pues recordemos que juntos podemos hacer mucho más.