Un nuevo informe dirigido por la FAO, presentado durante la Semana Mundial del Agua, brinda orientación sobre la gestión integrada de los bosques y el agua. Según esta nueva guía fue publicada conjuntamente por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Unión Internacional de las Organizaciones de Investigación Forestal (IUFRO por sus siglas en inglés), el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea, el Servicio Forestal de los Estados Unidos y otros asociados.
La guía, titulada A Guide to Forest-Water Management, (Guía para la Gestión de los Bosques y el Agua) http://www.fao.org/documents/card/es/c/cb6473en/ , es la primera publicación mundial completa que ofrece orientación sobre la contribución de los bosques a un enfoque holístico de la gestión de los recursos hídricos, que incluye la gestión, el seguimiento y la valoración de los bosques para la prestación de servicios ecosistémicos relacionados con el agua.
Las cuencas hidrográficas boscosas contribuyen sustancialmente al agua dulce accesible en el mundo para usos agrícolas, industriales, ambientales y domésticos, y las principales ciudades del mundo dependen cada vez más del agua de estas cuencas.
Dos tercios del suministro de agua de las ciudades se beneficiarían de contar con una mayor calidad del agua gracias a una mejor gestión forestal, lo que incluye protección, restauración o reducción de la carga de combustible en los bosques a fin de reducir al mínimo el riesgo de incendios.
“La seguridad hídrica es un importante desafío mundial, que tiene repercusiones en la agricultura, la producción de energía, las necesidades básicas de la población y los ecosistemas de apoyo”, dijo la Directora General Adjunta de la FAO, Sra. María Helena Semedo.
“El doble desafío del cambio climático y el aumento de la población está acrecentando la presión sobre nuestros ecosistemas. Tenemos que reconocer que los bosques desempeñan un papel clave en la seguridad hídrica y priorizar el agua en las decisiones en materia de gestión y gobernanza forestal”, agregó.
Agua dulce accesible
La conexión entre los bosques y el agua es esencial para cumplir la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, especialmente los Objetivos 6 (Agua limpia y saneamiento), 14 (Vida submarina), 15 (Vida de ecosistemas terrestres) y 13 (Acción por el clima).
Los bosques y los árboles son un componente esencial del ciclo del agua. También desempeñan un importante papel en la regulación de la cantidad, la calidad y la periodicidad del agua, y ofrecen funciones de protección contra la erosión del suelo y las costas, las inundaciones y las avalanchas, conocidas en su conjunto como servicios ecosistémicos relacionados con el agua.
Según la “Evaluación de los recursos forestales mundiales 2020 de la FAO”, http://www.fao.org/documents/card/es/c/ca9825es solo el 12 % de los bosques del mundo se gestionan con la protección del suelo y el agua como objetivo principal.
La guía insta a mejorar la gestión forestal, dando prioridad a la prestación de los servicios ecosistémicos relacionados con el agua.
Es imprescindible restaurar y reforestar las cuencas de los ríos para proteger las fuentes subterráneas.
La desaparición de la cobertura de los bosques ribereños o bosques en galería en muchos ríos, como por ejemplo el Reconquista, agrava la contaminación directa de los cursos de agua en los tramos densamente poblados rompiendo drásticamente con el ciclo del agua.
Esto es necesario para garantizar que los bosques también alcancen su pleno potencial como solución basada en la naturaleza para abordar la seguridad hídrica, ayudando a garantizar agua de calidad suficiente para sostener comunidades y ecosistemas resilientes.
“Estamos convencidos de que la valoración de los servicios ecosistémicos es el punto de partida para la gestión de los bosques y todos los beneficios que proporcionan”, afirmó el Sr. Shirong Liu, Vicepresidente y Coordinador Adjunto del Greupo de tareas sobre las interacciones entre los bosques y el agua en un entorno cambiante de la IUFRO.
Orientación práctica
La nueva guía está dirigida a los profesionales de los recursos naturales con el objetivo de mantener y gestionar activamente los bosques en favor de la prestación de servicios hídricos y de hacer participar en este compromiso a la comunidad, los responsables de la formulación de políticas y los inversionistas.
En la guía se revisan técnicas y metodologías emergentes, se ofrecen orientación práctica y recomendaciones sobre cómo gestionar los bosques en favor de los servicios ecosistémicos relacionados con el agua, y se presentan estudios de casos de ecosistemas en los que los dos recursos están fuertemente conectados, como los manglares, las turberas, las tierras secas y los bosques tropicales de zonas nubosas.
En la publicación, también se plantea que la ciencia ciudadana -la participación del público en la investigación científica y el seguimiento– y las nuevas herramientas de Internet pueden ayudar a mejorar la evaluación de los bosques y el agua y, a su vez, influir positivamente en las decisiones en materia de políticas y de gestión.
En particular, el Sistema de acceso, procesamiento y análisis de datos de observación de la Tierra para el monitoreo de la superficie terrestre (SEPAL) de la FAO, se destacan como nuevas formas de seguimiento y presentación de informes sobre el nexo entre los bosques y el agua.
Conclusión
Científicos de todo el mundo están llamando a reconocer y destacar la importancia de los bosques para el agua dulce del mundo. Ahora más que nunca necesitamos cambios acelerados y radicales.
La contribución de los bosques al ciclo del agua es crucial para la supervivencia humana y el bienestar futuro. De ahí que deban considerarse como un bien global y conservarse y aprovecharse en beneficio de todos.
Fuente: FAO/AAPN
*Presidente* y Vicepresidente**
Asociación Amigos de los Parques Nacionales (AAPN)
Expertos Comisiones Mundial de Áreas Protegidas (WCPA) y,
Educación y Comunicación (CEC)
Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN)