Según Pilar Montes de Oca, la gente fifí era aquella que tenía gusto por la moda francesa durante el Porfiriato. Mientras, al consultar el diccionario de la lengua española me topé con que fifí refiere a una “persona presumida y que se ocupa de seguir las modas”.
También encontré que, de acuerdo con Francisco Ramos Aguirre, cronista de Ciudad Victoria, en la década de 1920 existió un bisemanario llamado “El fifí”, el cual circuló menos de dos años cubriendo los hechos cotidianos de Tamaulipas, con un toque de humor.
Por su parte, el presidente López declaró que los fifís fueron quienes se oponían al gobierno de Francisco I. Madero (1911-1913). Incluso, aseguró que quemaron la casa de la familia Madero y celebraron el golpe de Estado. Es por todos conocido que Andrés Manuel siente un especial agrado por la historia de México, pero todo parece indicar que, como en previas ocasiones, tergiversó los hechos para salir a flote durante su conferencia de prensa del 26 de marzo de 2019.
En respuesta a dichas declaraciones, en su artículo “Mitos e invenciones de López Obrador”, el doctor Joaquín Robles Linares Negrete, expresidente de la Sociedad Sonorense de Historia, señala que toda “aseveración en el campo de la historia se tiene que probar, lo elemental es remitirse a fuentes y luego hacer un análisis de estas para poder sostener tal afirmación”. Algo que el presidente no hizo, ni hará.
Sin embargo, algo que sí hizo fue responder: “¿Qué son los fifís? Son fantoches, conservadores, sabelotodos, hipócritas, doble-cara”. Al analizar cada uno de esos calificativos con el diccionario de la RAE, resulta un interesante ejercicio:
“Fantoche”, dícese de un sujeto neciamente presumido, es decir, vano, jactancioso, orgulloso, que tiene alto concepto de sí mismo. Por favor, no crean que las camionetas de lujo, lentes Ray-Ban, y las fotografías narcisistas en cada oficina gubernamental, tienen algo que ver.
“Conservador”, persona que tiende a mantener el orden social y los valores tradicionales frente a las innovaciones y los cambios radicales. Nada es verdad, nada es mentira, todo depende del cristal con que se mira.
“Sabelotodo”, se define como una persona que presume de sabia sin serlo. El pez por su propia boca -y actos- muere.
“Hipócrita”, refiere a una persona que finge cualidades o sentimientos contrarios a los que verdaderamente se tienen o experimentan. En BC, ¿nos cuidamos todos?
“Doble-cara” es quien se comporta de una manera distinta en cada grupo. Primer acto: “Si viene gente de Estados Unidos y se contagian, se van a regresar contagiados”. Segundo acto: ¿Cómo le hago yo? Nada más no voy a ese lugar y no corro el riesgo de contagiarme”. Tercer acto: “prefiero hacer feliz a mi esposa que a los envidiosos”. ¿Cómo se llamó la obra?
“¡Fuera máscaras! No aparentes ser liberal, independiente, libre, cuando eres un conservador que estas defendiendo a grupos de intereses creados”, así concluyó el presidente su descripción de los fifís. ¡Ah que caray!
Post Scriptum. “Muchos se sintieron fifís ¡No! ¡Hay niveles! El fifí es el junior de conservadores, de oligarcas”, Andrés Manuel López Obrador.
* El autor cuenta con una Maestría en Comunicación Estratégica y es doctorando en Derecho Electoral.
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