La contingencia sanitaria global ha sacado a relucir la inteligencia y capacidad de los bajacalifornianos para adaptarse a nuevas formas de trabajo en sus empresas, con el fin de evitar un colapso económico en la región.
Así lo expresó Román Caso Espinosa, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti), delegación Noroeste, quien aseguró que es de admirarse el cómo han reaccionado las industrias ante la pandemia de COVID-19.
«Desde industria electrónica de manufactura hasta contact centers y empresas de soporte técnico, han tenido que innovar la forma de lograr resultados en sus actividades, con una nueva metodología y nuevas prácticas de trabajo, haciendo frente a la contingencia, donde lo principal que es mantener la integridad física de nuestra gente», destacó.
Caso Espinosa mencionó que algunos socios de la cámara han eviado a personal adminsitrativo a trabajar desde casa, el cual representa entre un 20% y 30% de la población total de una empresa, por lo que, al tener menos gente, hay menos concentración en áreas comunes.
Mientras que para el personal que se queda en la zona de manufactura, agregó, se han tenido que reestructurar las líneas de producción, dejando espacios de dos metros o más entre cada persona, además de aplicar el uso de cubrebocas y guantes, entre otras medidas de higiene.
El dirigente detalló que en algunos procesos de trabajo, donde es simultáneo que dos o más personas trabajen en una sola pieza, se han modificado para que cada uno realice su trabajo, turnándose cada quién lo que le toca, sin estar al mismo tiempo.
«También se ha dado la incorporación más ágil y rápida de mecatrónica y robótica que, precisamente, eran de los pasos naturales que iban a tomar para llegar a la industria 4.0, y que ante esta situación, más rápidamente lo están adoptando, para dejar al colaborador humano a mayores distancias», subrayó.
El líder de la Canieti Noroeste resaltó que la crisis global por el coronavirus ha acelerado ciertos procesos de innovación productiva, así como creatividad que grupos de trabajo han tenido que desarrollar para que, de una manera responsable y saludable, se mantenga la economía fluyendo.
De esta manera, concluyó Román Caso, una vez sobrepasando esta contingencia, se tenga una recuperación más rápida y completa y que la región se mantenga económicamente sana, donde «la afectación se quede en un tema de contingencia biológica, y no tengamos, después, una contingencia económica severa».