Con motivo del 20 aniversario del Museo de las Californias, el Centro Cultural Tijuana, organismo de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, llevará a cabo un conversatorio en el que tomarán parte expertos en diversos campos este lunes 24 de febrero, a las 19:00 horas, en la Sala Federico Campbell, con entrada libre.
En la charla participarán el Lic. Alfredo Álvarez Cárdenas, ex director del CECUT en cuya gestión se inauguró el Museo; el historiador Marco Antonio Samaniego López; el arquitecto Juan Manuel Aguilar Freeman; la Mtra. Gloria González Fernández y el restaurador Hilario de Jesús Hernández Piña.
El Museo de las Californias cumplirá en esa fecha 20 años de poner al alcance de los visitantes la historia de las dos Baja California y parte de la Alta California, que en el pasado formaron una sola región. Se trata de un recinto único en su género en Tijuana, que transmite una visión panorámica de la historia regional.
Mediante una colección permanente, el Museo ofrece un recorrido que permite conocer procesos y acontecimientos del pasado que contribuyeron a forjar la identidad de la región. El recinto exhibe objetos representativos de la historia regional, desde la prehistoria hasta la segunda mitad del siglo XX; diseñado en una rampa helicoidal de 2,200 metros cuadrados y es el único espacio cultural en la ciudad que muestra una síntesis de la historia regional.
El Museo de las Californias revisa la era prehispánica, la exploración novohispana de la península, la época misional, la Independencia y el siglo XIX, el Porfiriato, la Revolución mexicana de 1910 y la formación de diversos asentamientos en la región hasta mediados del siglo XX.
Con clara vocación didáctica, el museo está organizado en forma cronológica y presenta cada una de las etapas de la historia bajacaliforniana representadas por objetos de época y réplicas a escala de navíos, enseres e inmuebles característicos de la vida y la cultura de la región.
La propuesta museográfica da inicio con el pasado indígena anterior a la presencia española, mediante esculturas de tamaño natural que muestran la fisonomía de los grupos étnicos que poblaron lo que es hoy la península de Baja California.
Las réplicas de las embarcaciones en las que arribaron los conquistadores resultan muy atractivas para los visitantes, pues reproducen con gran detalle y precisión los navíos utilizados por los primeros europeos que llegaron a territorio peninsular. Destaca, entre esas réplicas, la famosa Nao de China que cubría en la época colonial la ruta mercantil entre América y Asia.
Luego pasa revista a la época misional, que aparece documentada mediante símbolos y objetos religiosos, al igual que maquetas de las edificaciones que sirvieron para arraigar hábitos sedentarios en la población seminómada de entonces.
La veracidad con que se reproducen los estilos arquitectónicos de las misiones, algunas de las cuales se mantienen aún en pie, así como la profusión de detalles, transmiten una idea muy aproximada de cómo se logró el paulatino sedentarismo de los nativos.
La época de Independencia, ilustrada con manifiestos, proclamas, armas y objetos de la vida cotidiana de ese tiempo, está igualmente presente en los pasillos del Museo de las Californias, junto con otros sucesos relevantes del siglo XIX.
Resalta por su importancia para la historia posterior de Tijuana la exhibición de una réplica de las mojoneras que delimitaron la frontera entre México y Estados Unidos resultante de la firma del Tratado de Guadalupe-Hidalgo, el 2 de febrero de 1848, pues determinó en gran medida lo que sería posteriormente esta ciudad.
Con dos rampas ascendentes de forma semicircular unidas por un pasillo central, el Museo de las Californias exhibe también copias de los primeros títulos de concesión de tierras en Baja California, entregados por los gobiernos de Benito Juárez y Porfirio Díaz, como forma de estimular el asentamiento de población en los entonces desolados parajes de esta parte del país.
El recorrido histórico que ofrece el Museo de las Californias desemboca en el siglo XX, con referencias a la Revolución Mexicana y la época posterior, cuando Tijuana emerge como centro de atracción turística, debido a la promulgación en Estados Unidos de la Ley Volstead, conocida también como “ley seca”, en 1919, lo que motivó la instalación de los primeros casinos que trajeron una época de auge económico a esta frontera, con la inauguración del casino Agua Caliente, que llegó a ser uno de los más famosos hacia finales de los años 20, hasta su cierre a mediados de la década siguiente.
Una gran lección de historia, ilustrada con objetos, documentos y réplicas guarda el Museo de las Californias que este lunes cumplirá sus primeros 20 años de existencia.