Para potencializar el desarrollo y crecimiento económico de Tijuana es necesario aprovechar los beneficios del programa Zona Libre de la Frontera Norte, afirmó Arturo González Cruz, presidente del municipio que pertenece al estado de Baja California.
A dos semanas de haber tomado protesta y en entrevista con El Economista, el edil explicó su proyecto de desarrollo económico donde se priorizan cuatro ejes: transparencia, seguridad, bienestar y desarrollo económico y movilidad.
En este último punto, dijo, se busca trabajar en coacción con la zona libre, cuya aplicación empezó desde el primer día del 2019 en los 43 municipios fronterizos con Estados Unidos.
Entre los beneficios que otorga el programa, destacan la reducción del pago del Impuesto al Valor Agregado a 8% y del Impuesto sobre la Renta a 20%; también está el incremento del salario mínimo regional al doble y la homologación del precio de combustibles con los de la Unión Americana.
“Claro que vamos a apostar por la zona libre, vamos a buscar más inversión, que venga gente e invierta. Somos el quinto municipio más importante en cuestión de desarrollo económico, buscamos ser de los primeros tres, son metas a largo plazo. Como gobierno haremos todo lo posible para que se pueda invertir”, indicó González Cruz.
En ese sentido, señaló que también se le propondrá a la Secretaría de Economía del gobierno federal inscribir a Tijuana en el Instituto Nacional del Emprendedor, “que es de donde se pueden obtener fondos para capacitaciones para las micro, pequeñas y medianas empresas; esto nos ayudaría con la zona libre”.
Aseguró que con el programa fronterizo se pretende potencializar las industrias aeroespacial y de fabricación de productos médicos, así como el sector exportador, “para ello, debemos analizar bien qué se puede impulsar”.
“Mucha gente no conoce que Tijuana es sede de la industria aeroespacial, es de los líderes a nivel mundial. Por otro lado, en la ciudad también se fabrican los marcapasos, hay producción de aparatos médicos cada vez mayor. Hay que impulsar”, acotó.
Por otro lado, Arturo González hizo énfasis en que ya se reunió con el sector empresarial local, donde les dio a conocer una agenda de trabajo que incluye otorgar créditos a fondo perdido, efectuar avances en mejora regulatoria y en digitalización de trámites.
Comunicación
Entre los puntos prioritarios, el presidente municipal de Tijuana detalló que está la elaboración del presupuesto municipal para el 2020, donde se busca “una asignación de recursos que permita mejorar la calidad de vida de los habitantes”.
Por lo mismo, destacó que ya está en comunicación con el actual gobernador, Francisco Vega de Lamadrid, pero también con el mandatario electo, Jaime Bonilla Valdez.
“Vamos a asegurar el crecimiento económico de Tijuana y cumplir con todo lo prometido”, sostuvo.
Sobre ello, sin revelar cifras de inversión, el alcalde informó que se tiene contemplada la ejecución de siete obras en la Delegación La Presa Este y Sánchez Taboada, así como la rehabilitación de parques, canchas deportivas y centros comunitarios.
Retos
El presidente municipal expuso que en el eje de desarrollo económico también se atiende el sector movilidad, “debido a que son dos temas que siempre van de la mano, y uno sin el otro no pueden desarrollarse”.
Agregó que busca unir la periferia de Tijuana con el centro, para ello se está evaluando de qué manera se puede hacer un cambio en cuestión de transporte y comunicación.
Otro de los retos que acentuó el edil es que se buscará un modelo de administración pública que permita una interacción constante con la ciudadanía.
“Vamos a desarrollar sitios digitales para que los ciudadanos evalúen y califiquen el desempeño del gobierno, democratizando el quehacer político”, aseveró.
“En esta administración se apostará por un gobierno exponencial, verdaderamente democrático que rinda cuentas claras en el momento que cualquier persona lo requiera, entre otras acciones”, finalizó.