El subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera asegura que México cuenta con una serie de “chalecos antibalas” que ha construido para enfrentar choques externos, al aplicar lecciones aprendidas tras las cinco recesiones que se han presentado en México desde 1983.
Ante la plana mayor de funcionarios de Fitch Ratings, la calificadora que hace 12 días envió a Pemex a cotizar con grado especulativo, Herrera detalló que estos chalecos son: la Línea de Crédito Flexible abierta en el Fondo Monetario Internacional (FMI), por US$70.000 millones; el monto extraordinario de reservas internacionales en US$178.299 millones; más de 280.000 millones de pesos, poco más de un punto del PIB, en fondos de estabilización de ingresos públicos y de estabilización de estados.
Admitió que para continuar apuntalando estos escudos de protección, requieren la autorización para utilizar los fondos de estabilización que por el total, cercano a un punto del PIB, les permitiría paliar la peor crisis que pudiera presentarse.
“Aún nos falta una política contracíclica y recursos para aplicarla. Tenemos los fondos de un monto importante, aproximado a un punto del PIB, pero su manejo está asociado a la disminución de los ingresos públicos. Es nuestra prioridad, que estos fondos se puedan utilizar cuando se presente una recesión, como sucede en otros países que cuentan con estabilizadores automáticos”, comentó en el panel de bienvenida al Foro de Fitch 2019, titulado: Inversión, Crecimiento y Disciplina Financiera.
Al término de su presentación, conversó con el Director Mundial de Soberanos en la agencia, James McCormack, quien le hizo tres preguntas puntuales: Cómo enfrentará la administración el deterioro de las condiciones financieras de Pemex; la estrategia para encarar la incertidumbre por el cambio de señales en el comercio con Estados Unidos y el impacto del plan migratorio que deben aplicar para evitar que Estados Unidos imponga aranceles.
Herrera admitió que en este momento no hay ingresos públicos suficientes, y que sería pertienente fortalecer las entradas del sector público.