El Servicio de Administración Tributaria (SAT) combatirá a los “factureros”, empresas que venden facturas falsas para pagar menos impuestos o incluso pedir la devolución de saldos a favor, por lo que las empresas deben revisar a sus proveedores para evitar caer en este tipo de delitos fiscales.
Así lo señaló Miguel Ángel Guillén, Director de Impuestos Corporativos de TLC Asociados, quien explicó las acciones que pudieran implementar las empresas para poder cumplir en materia tributaria, dado que ahora este tipo de delitos fiscales son catalogados como graves.
Indicó que el SAT recientemente ofreció datos congruentes con respecto al tema de las Empresas que Facturan Operaciones Simuladas (EFOS) y la Empresas que Deducen la Operación Simulada (EDOS).
“En términos generales este problema se trata de la relación que existe por la adquisición, emisión y venta de facturas (CFDI) que avalan operaciones que no existen o que simulan una venta de un producto, la renta de un bien o la prestación de un servicio”, dijo el especialista.
El CFDI “Falso” es un término que la autoridad interpreta a la acción de tener una factura electrónica que cumple con todos los requisitos fiscales, apuntó, excepto el hecho de la existencia como tal de dicha operación.
“La afectación se encuentra cuando la empresa que recibe el CFDI “Falso” lo hace deducible sin haber realizado dicho gasto en su totalidad o sin siquiera recibir el servicio o el bien, ocasionando que la deducción logra disminuir el impuesto a pagar de ISR y del IVA”, detalló.
Del 2014 al 2019 se han detectado 8,204 contribuyentes EFOS, los cuales han generado un total de 8.8 millones de facturas falsas que aún se encuentran en circulación como activas, advirtió el experto.
Los CFDI mencionados acumulan un monto de 1,611,418 millones de pesos en donde los beneficiarios de estos cuentan con la posibilidad de utilizarlo como gasto deducible en sus declaraciones y, en caso de así hacerlo, se presume una evasión de 354,512 millones de pesos.
Cerca del 60% de los EFOS que aparecen en la lista definitiva publicada en el portal del SAT se encuentran con domicilios en Ciudad de México (13%), Jalisco (10%), Nuevo León (9%), Veracruz (6%), Coahuila (5%), Estado de México (5%), Guanajuato (4%), Guerrero (3%), y Puebla (3%).
Por ello, dijo es importante que las empresas revisen sus proveedores, destacó el directivo, es por ellos que en TLC Asociados se ha creado el programa de Compliance Fiscal, con el que se asesora a las empresas a analizar los proveedores en la lista 69B CFF del SAT.
Para concluir, señaló que se acompaña para la revisión de posibles operaciones inexistentes, con el cual se minimiza el riesgo de aparecer en el listado del SAT, y se establecen estrategias para mejorar las buenas prácticas contables-fiscales.
Para quienes deseen mayor información sobre este y otros temas fiscales, el Director de Impuestos Corporativos, puso a disposición la página de internet www.tlcasociados.com.mx