Hace 50 años, Tijuana apostó por el turismo de salud y no se equivocó. Hoy, la ciudad fronteriza se ha convertido en el principal receptor de turistas de salud del país. Y las cifras lo avalan. El año pasado recibió 1.7 millones de pacientes y sus acompañantes, la mayoría de ellos provenientes de Estados Unidos (California y Arizona), Canadá y estados como Jalisco, Sinaloa, Sonora, Nuevo León y Ciudad de México, lo que representó una derrama económica de 600 millones de dólares (mdd).
Esto ha llevado a Tijuana a ser considerada como la capital latinoamericana del turismo de salud y el nuevo Houston de México. Y el potencial de crecimiento es enorme, gracias a su privilegiada ubicación geográfica. El ser vecino de uno de los más grandes estados proveedores de turismo de salud, como lo es California, considerada la octava economía del mundo, le da una gran ventaja frente a otros estados fronterizos, como Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, o incluso con aquellos que cuentan con una gran infraestructura hospitalaria como Ciudad de México y Jalisco. Y empresas de los sectores médico, hotelero y gastronómico lo saben; de ahí que año con año incrementen sus inversiones.
Actualmente, el 45% del turismo de salud que llega a Baja California proviene de ese estado, sobre todo de San Diego, la segunda ciudad más poblada de California.
Pero, ¿por qué las personas eligen Baja California y en especial Tijuana como su destino médico? Porque ofrecen servicios de salud de calidad, al nivel de Estados Unidos (EU) o Canadá; cuentan con hospitales y clínicas certificadas por organizaciones internacionales de la salud, doctores afiliados a asociaciones médicas mexicanas y americanas, atención médica más rápida que en EU o Canadá, hospitales y médicos que aceptan seguros médicos americanos, doctores y personal de hospitales bilingüe, carril médico en el cruce de la frontera internacional, hoteles con cuartos especiales para pacientes en recuperación y servicios de comida preparada de acuerdo a las indicaciones de sus médicos y costos más bajos en los procedimientos médicos (entre 25% y 80%), a diferencia de EU o Canadá.
Actualmente, Baja California cuenta con 2,838 consultorios, de los cuales 1,214 son dentales y 1,231 son médicos; 366 hospitales privados, dos hospitales psiquiátricos y 25 de otras especialidades, 6,285 farmacias y 1,293 laboratorios.
Por su parte, Tijuana cuenta con 64 hospitales grandes, debidamente acreditados, 13 de ellos certificados por el Consejo de Salubridad Nacional, un órgano colegiado que depende directamente del presidente de la República y tiene el carácter de autoridad sanitaria, con funciones normativas, consultivas y ejecutivas. El resto está en el proceso de culminar con la certificación.
Entre los hospitales más importantes se encuentran: Advanced Health Medical Center, Angeles Hospital, Centro Médico Hospital del Prado, Cosmed, Excel Hospital, Oasis of Hope Hospital y Simnsa, este último fue la primera Organización de Mantenimiento de la Salud (HMO) mexicana en obtener una licencia como plan de servicios de atención médica por parte del estado de California. Su red se extiende a través de las ciudades fronterizas de Tijuana, Tecate y Mexicali.
Además, Baja California ofrece 10 especialidades médicas: cirugía plástica (cirugías faciales, estiramientos faciales, cirugía de nariz, cirugía de párpados, reducciones y aumentos de senos, reconstrucciones de mastectomía, lipoescultura, abdominoplastia, lifting corporal), servicios dentales (adhesivos, prótesis dentales, extracciones, implantes, coronas, carillas, odontología pediátrica, cosmética y odontología general), bariatría (prevención y tratamiento de la obesidad), cirugía correctiva de los ojos (cirugía refractiva, respaldada con tecnología de punta aprobada por la FDA, que brinda corrección personalizada de miopía, astigmatismo e hipermetropía), fertilidad (fertilización in vitro, inyección intracitoplasmática de esperma, inseminación intrauterina, vitrificación de embriones, inducción de la ovulación, incubación asistida y fecundación in vitro), oncología, cardiología (angiografías, angioplastia, cardiología de intervención, cirugía de marcapasos y cirugía de derivación coronaria), ortopedia y traumatología (reemplazos de cadera y rodilla, cirugía de espalda y columna vertebral, reconstrucción del hombro y microcirugía de manos y pies), medicina alternativa y homeopática, especialidades adicionales (alergía e inmunología, dermatología, endocrinología, medicina familiar, hematología, medicina interna, nefrología, otorrinolaringología, neurología, atención pediátrica), spa y bienestar (hoteles saludables, aguas termales, excursiones, retiros espirituales).
Tijuana cuenta con la mayoría de dichas especialidades, mientras que la Delegación de Vicente Guerrero, mejor conocida como Los Algodones, se especializa en servicios dentales (cuenta con más de 400 consultorios) y es un paraíso para los americanos retirados, pues el poblado está diseñado para la atención y el cuidado de personas mayores.
Futuro asegurado
Arón Ureña, coordinador estatal de Turismo de Salud y Bienestar de la Secretaría de Turismo de Baja California, estima que el turismo de salud en la entidad crecerá entre 10 y 12% los próximos años.
“El estado se ha convertido en el principal receptor de turistas de salud del país y estamos muy optimistas en que se mantendrá así por largo tiempo, pues están llegando cada vez más inversiones para desarrollar nuevos proyectos hospitalarios, hoteleros y restauranteros. El año pasado nos visitaron 2.8 millones de pacientes y sus acompañantes, lo que representó una derrama económica de 1,000 mdd; de estos, 1.7 millones se atendieron en Tijuana. Este año, el número de turistas de salud en la ciudad fronteriza será de casi 2 millones”.
Sin duda, destaca el funcionario, el nivel de atención que se brinda a los pacientes es clave para que estos regresen y recomienden los servicios médicos que se ofrecen en la entidad entre sus familiares y conocidos. “Un ejemplo de ello son los servicios de transporte especializado, que se encargan de recoger al paciente y sus acompañantes en el Aeropuerto de San Diego y trasladarlos al hospital, hotel o alguna amenidad durante su estancia en Tijuana, o sea, manejan toda la logística”.
Imán de inversiones
Para muchas empresas, Tijuana es considerada como el Houston de México y así la ven a futuro, por lo que están apostándole e invirtiendo, como Excel Medical Center, Centro Médico Hospital del Prado y Simnsa, que construirán nuevas unidades hospitalarias en la línea fronteriza; una de ellas, la de Simnsa, tendrá un costo de 130 mdd.
“Otros hospitales y empresas inmobiliarias se están sumando a este esfuerzo con proyectos innovadores para hacer de Tijuana el principal receptor de turistas de salud del país”, destaca Ureña.
Uno de estos proyectos es el desarrollado por Grupo Abadi, llamado New City Medical Plaza, que iniciará operaciones este año y que contará con una torre médica con 50 camas de recuperación, ocho quirófanos (primera etapa), centros de especialidad, imagenología, hotel (150 habitaciones, 30 para recuperación y rehabilitación), médicos certificados, soluciones de gestión y seguimiento de pacientes, centro de exposiciones, área comercial y gastronómica, con una representación del Valle de Guadalupe; estacionamiento para 1,000 autos, helipuerto y servicios bancarios, cuya inversión supera los 100 mdd.
“En Tijuana hay muy buenos hospitales, médicos, laboratorios, hoteles y restaurantes, pero hasta hora no existía un sitio que tuviera todo en un mismo lugar; por eso decidimos hace tres años llevar a cabo uno de los proyectos más innovadores del país”, comenta Isaac Abadi Duek, director general de Grupo Abadi.
El ejecutivo dice que los seguros americanos y las compañías grandes, que autoaseguran a sus empleados, están muy interesados en trabajar con ellos, ya que los servicios médicos tendrán la misma calidad y nivel que en EU, pero el costo será 50% menor. “Esperamos recibir entre 800,000 y un millón de pacientes al año”.
Abadi Duek cree que Tijuana puede albergar muchos proyectos de este tipo. “California es la economía más importante de EU, por lo que el potencial es enorme; solo hay que cambiarle el chip al americano de lo que es Tijuana y México, en el sentido de que no tiene sentido asistir a un hospital en EU cuando en México puedes pagar la mitad por un servicio de igual o mayor calidad. Además, el tema de la calidez humana no la tienen en EU; aquí somos más amables y atentos, y eso le gusta mucho al americano”.
A la par, grupos hoteleros, restauranteros y de vivienda están construyendo y planeando más y más proyectos en el estado y Tijuana, como Grupo Lucerna, que preside Héctor Kabande. “Creemos que el turismo de salud crecerá a tasas del 20% en los próximos cinco años en Baja California y nosotros no nos vamos a quedar fuera. Vamos a participar, vamos a construir un hotel en el Valle de Guadalupe, un hotel de lujo, un hotel boutique, pero también vamos a hacer un hotel para el tema de turismo de salud y de retiro, buscando el mercado alto de Europa, EU y Canadá”.
Los retos
La infraestructura, la seguridad y la certificación de médicos, hospitales y clínicas son claves para que el turismo médico siga creciendo en la entidad, sostiene Arón Ureña.
“La seguridad es crucial. Se está trabajado para reforzarla en los distritos médicos, la ruta del vino y el centro de la ciudad. En los cruces fronterizos estamos impulsando el carril médico para que los pacientes y sus acompañantes puedan ingresar y salir de México de manera más rápida”
En el tema de las certificaciones, explica el coordinador estatal de Turismo de Salud y Bienestar de la Secretaría de Turismo de Baja California, se ha estado trabajando con la Depris, que es la Dirección de Protección Contra Riesgos Sanitarios en el estado; la CAME, que es la Comisión de Arbitraje Médico de Baja California, y la Cofepris, que es la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, para que todos los hospitales y medicos se certifiquen y recertifiquen.
Héctor Kabande, de Grupo Lucerna, asegura que el turista que visita Tijuana se va feliz de la ciudad que ve, pues ya no es la Tijuana de hace 10 años; pero se tiene que trabajar mucho en el tema de la infraestructura. “Tijuana es una ciudad que está creciendo demasiado y no nos estamos anticipando. Seguimos trabajando prácticamente con las mismas arterias”.
El empresario hotelero dice que una ciudad que tiene una buena infraestructura, un buen sistema de transporte, arte, seguridad y gastronomía, es una gran ciudad, y a eso debe aspirar Tijuana.
Todo parece indicar que la idea que tenían los americanos de Tijuana, de una ciudad peligrosa, de bares y burros pintados de cebra, está cambiando rápidamente, gracias a la industria hospitaliaria. “Ahora vamos a posicionar a Tijuana, a Baja y a México como un destino de salud”, dice Abadi Duek, de Grupo Abadi.