No importa si se ha viajado antes a China o si es la primera vez, cada viaje debe ser único y especial, y parte de lograrlo es el modo en que se llegue. Hay varias formas para llegar, con largas horas de viaje, escalas, esperas en aeropuertos, pero la manera más cómoda y moderna es con Hainan Airlines, la única aerolínea que este año ha abierto vuelos directos desde México a China ida y vuelta.
Esta gran iniciativa es un honor y una muestra del aprecio mutuo entre China y nuestro país, pues son más grandes los lazos de cariño que la distancia y la diferencia de idiomas y culturas. Esta nueva ruta aérea nos facilita la llegada a este país cautivante y de cultura milenaria.
Grupo Hainan es la cuarta con la flota más grande de China, y ha establecido un récord en seguridad para todos sus viajeros, con 19 años y más de 1.4 millones de horas de vuelo sin ningún accidente. Los vuelos directos desde Beijing -México son los primeros en toda Latinoamérica en llevarnos sin escalas a este exótico país, con 36 asientos de clase ejecutiva y 177 asientos en turista. Por su comodidad e impecable servicio, las horas que toma cruzar las más de siete mil millas que nos separan, pasan, literalmente, volando.
Hermosas como muñecas de porcelana, las sobrecargos visten coquetos uniformes del diseñador Lawrence Xu, el único con la habilidad y el conocimiento para exhibir su trabajo en los desfiles de moda franceses. Los diseños de los uniformes llamados Rosy Clouds están inspirados en el poema clásico de Xu Zhimo “Taking Leave of Cambridge Once Again”. El diseño, como los vuelos, une a las culturas oriental y occidental de forma artística, expresa la paz entre los cielos nublados y simboliza las aves de alas doradas que vuelan entre esas nubes.
Desde el instante en que subimos se dedican a mimarnos con toda clase de atenciones, con bocadillos deliciosos, y nos ofrecen un amplio y variado menú de comida occidental preparada en su punto. Su business class es totalmente única y diferente, con butacas totalmente reclinables que se convierten en cómodas camas con cobijas. Las aeromozas cuidan nuestro sueño, nos arropan y controlan el nivel de luz para que podamos llegar llenos de energía a Beijing.
Los vuelos parten desde Tijuana, que está a un paso de San Diego, por lo que las posibilidades de conexión son mucho mayores, y nos llevan directo a Beijing, con vuelos cada semana a bordo de un cómodo Boeing 787 de 36 asientos de clase ejecutiva y 177 asientos en turista. Esta nueva ruta conecta no sólo a México, sino a todos los países de América, por lo que el crecimiento del turismo hacia y desde China será el nuevo puente que nos una.