Violencia: El foco rojo
El próximo presidente tendrá que enfrentar problemas de inseguridad pública y violencia con niveles no registrados hasta la fecha. De acuerdo con cifras oficiales, en 2017 se contabilizaron 24,892 homicidios dolosos, en tanto que hasta mayo de este 2018 ya iban 11,437. Esto significa que, si se mantiene el mismo ritmo, 2018 podría terminar con un total aún más alto.
La situación ha provocado que la inseguridad sea uno de los temas que más interesan y preocupan a la ciudadanía, en particular en estados como Guerrero, Tamaulipas y Veracruz.
Desde finales de 2006, el modelo de seguridad federal depende del despliegue del Ejército y la Marina en zonas con alta incidencia delictiva por la presencia del crimen organizado. Sin embargo, dicha estrategia es criticada por especialistas, organizaciones y organismos como la propia ONU, que argumentan que la presencia de militares en las calles da pie a violaciones a los derechos humanos.
En ese contexto, las autoridades han reconocido que no es posible sacar de forma inmediata a soldados y marinos de lugares como Reynosa, Tamaulipas; Tijuana, Baja California, o la región de Tierra Caliente de Michoacán, pues esto implicaría un incremento de la violencia. En la campaña, los cuatro candidatos presidenciales expresaron la misma conclusión, incluido el virtual ganador, López Obrador.
Diferentes expertos coinciden en que, para iniciar el retiro de los militares, el próximo presidente cuando menos debe fortalecer a la Policía Federal, promover la creación de policías estatales y municipales capacitadas, y fortalecer las labores de inteligencia del Estado.
Corrupción: La mancha en el país
Según Transparencia Internacional —responsable de la medición—, México necesita la correcta implementación del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), así como crear una Fiscalía General de la República capaz, autónoma e independiente que asegure que las investigaciones no estén sujetas a intereses políticos o privados.
México, además, es la cuarta nación con más impunidad en el mundo, de acuerdo con el Índice Global en la materia elaborado por la Universidad de las Américas de Puebla (UDLAP), y la Auditoría Superior de la Federación (ASF) ha detectado que en solo cinco años, de 2012 a 2017, hubo posibles daños al erario por 6,879 millones de pesos.
Aparte de estos datos, hay expedientes que ilustran la gravedad del problema. En la actual administración se dieron a conocer diversos casos de posibles actos de corrupción, que van desde la Casa Blanca de la primera dama, Angélica Rivera, hasta los conocidos como «La estafa maestra», «Las empresas fantasma» de Javier Duarte o «Los piratas de Roberto Borge».
Otro caso es el escándalo de Odebrecht, en el que funcionarios de varios países de América Latina fueron sobornados para beneficiar a la constructora brasileña. En México, según lo han confesado directivos de la compañía, 10.5 millones de dólares se entregaron a funcionarios de Pemex, sin que hasta ahora haya detalles del hecho.
Gobernabilidad: ¿Y el Estado de derecho?
Un estudio de la consultora GEA-ISA sobre la gobernabilidad en el quinto año del sexenio de Enrique Peña Nieto muestra que el desplome de la confianza institucional derivó de hechos como la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa y el escándalo de la Casa Blanca, que marcaron un antes y un después en la administración que culminará el 1 de diciembre.
A esta falta de credibilidad se suma el enojo de los ciudadanos por la inseguridad, la pobreza y factores como el deterioro de la relación con EU tras la llegada de Donald Trump a la presidencia, según el mismo estudio. Por ello, el próximo presidente tendrá el desafío de dar resultados rápidos en estos rubros.
En cuanto a la capacidad operativa del Ejecutivo, un estudio de María Amparo Casar señala que la ausencia de mayorías legislativas en el Congreso se ha manifestado como uno de los principales retos desde 1997, pues, aunque hay una mayor pluralidad política, en ocasiones esto representa un freno para sacar adelante cambios.
Para hacerlo, al inicio de su mandato Peña Nieto impulsó el Pacto por México, con el que en sus primeros dos años logró concretar sus principales reformas. Pero tras la ruptura del acuerdo, las relaciones entre presidente y cámaras se complicaron y esto obstaculizó temas como el nombramiento del fiscal general.
Ahora, aún está por verse cuál será la fuerza del bloque Morena-PT-PES, pero se prevé que al menos alcance la mayoría simple en ambas cámaras.
Educación: La reforma en el aire
A la fecha, esa postura ha generado críticas hacia el virtual ganador de la presidencia por parte de expertos y organizaciones civiles.
Esta reforma quita al sindicato magisterial el control de las plazas y tuvo como premisa conseguir una educación de calidad, en un país donde los estudiantes no alcanzan el nivel de sus semejantes. De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el puntaje de los alumnos mexicanos en matemáticas es de 392 y de 407 en lectura, cuando el promedio es de 490 y 493, respectivamente.
Para 2016, solo 17% de las personas de entre 25 a 64 años en México había cursado la educación superior, la proporción más baja entre los países de la OCDE, donde el promedio es de 37%. En cuanto a posgrados, solo 1% tiene una maestría o equivalente, mientras que menos de 1% tiene un doctorado.
Además, este año se empezó a implementar un Nuevo Modelo Educativo, con el que se busca mayor una profundidad en aprendizaje, una educación integral, el desarrollo de habilidades socioemocionales, la autonomía curricular y una mejor articulación entre los niveles de educación básica, con la finalidad de preparar a los mexicanos que se requieren para el futuro.
Otro problema que se intensificó en esta administración fue el conflicto con el magisterio disidente que se oponía a la reforma educativa. A la fecha, estos docentes dicen que no se oponen a la evaluación, sino a que no se les ha dado la capacitación que se prometió.
Pobreza: Millones con carencias
En desarrollo social, el reto del presidente será mejorar la calidad de vida de 53.4 millones de pobres, lo que representa 43.6% de la población. Quienes aún carecen de servicios básicos para llevar una vida digna son 9.4 millones (7.6%), de acuerdo con la última medición del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Lo anterior se da a pesar de que en los últimos 14 años —entre 2004 y 2018— aumentó el presupuesto social, que pasó de 72,000 a 895,000 millones de pesos, así como el número de programas enfocados a combatir la marginación, de 89 a 126. Incluso, entre 2012 y 2016 la cifra de pobres subió de 53.3 a 53.4 millones de mexicanos.
Algunos de los desafíos concretos que señala el Coneval son:
- Sacar de la pobreza a 53.4 millones de mexicanos y a otros 9.4 millones que viven en pobreza extrema.
- Atender a los 12 millones 973,411 adultos mayores del país.
- Perfeccionar estrategias entre dependencias y órdenes de gobierno para reducir la pobreza multidimensional.
- Brindar educación básica completa a los adultos que no la tengan.
- Aumentar la cobertura de agua y drenaje.
- Aumentar el salario mínimo de manera moderada usando el mecanismo denominado Monto Independiente de Recuperación (MIR), propuesto por la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami), que ha sido empleado en los últimos dos años.
- Implementar acciones para abatir la desnutrición crónica, focalizándose especialmente en mujeres en edad fértil y en infantes durante los primeros dos años de vida.
- Implementar un seguro de invalidez.
- Implementar políticas públicas dirigidas a los pueblos indígenas, que contribuyan a mejorar sus capacidades para que compitan en el mercado laboral y así, además de impulsar el empleo de calidad, puedan acceder a la seguridad social.
Economía: TLCAN, reformas y presupuesto
En cuanto al TLCAN, se prevé que el proceso de renegociación se reanude después de las elecciones, y el acercamiento de la actual Secretaría de Economía con el equipo de transición se dará cuando este esté definido por el presidente electo.
El equipo negociador mexicano ha rechazado propuestas agresivas de EU, como incrementar las reglas de origen en el sector automotriz, la aplicación de aranceles por temporada a frutas y hortalizas mexicanas, terminar con el acuerdo cada cinco años (cláusula sunset) y eliminar los capítulos del TLCAN referentes a métodos de defensa ante disputas comerciales entre los socios.
Pese a los aranceles que ha aplicado EU a México y Canadá en represalia al rechazo de estas propuestas, México no cederá en esos temas polémicos pues afectaría su capacidad exportadora, dijo el 27 de junio el subsecretario de Comercio Exterior, Juan Carlos Baker.
Otra tarea en materia de comercio exterior para el siguiente gobierno será dar seguimiento a la aprobación y entrada en vigor del Acuerdo Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP) y de la nueva versión del Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y México (TLCUEM).
También estará la ampliación de las condiciones comerciales con Argentina y Brasil, además de la posibilidad de iniciar procesos para firmar acuerdos con Corea del Sur y Reino Unido, una vez que salga de la UE en marzo de 2019.
Continuar implementación de reformas
Para brindar certidumbre a los inversionistas, el gobierno deberá dar continuidad a la implementación de las reformas estructurales, especialmente la energética, por la que ya se tienen inversiones comprometidas por 200,000 millones de dólares, según la Secretaría de Energía.
No continuar con las reformas generaría «inconsistencias macroeconómicas». «No vemos cómo podría aumentar la inversión fija bruta. La inversión pública aumentaría, pero no compensa la menor privada», señala Sergio Luna, director de Estudios Económicos de Citibanamex.
El Paquete Económico 2019
¿En qué va a gastar y de dónde van a provenir los recursos para hacer realidad sus propuestas? El equipo de transición deberá tener presente, para el diseño del Paquete Económico 2019, las promesas de su candidato en campaña, un cuidadoso ejercicio del gasto y deuda pública, así como impulsar la inversión productiva y aumentar la base de recaudación.
El mayor reto estará en buscar y generar espacios para gasto en obra pública y hacer realidad la promesa de apoyos económicos prometidos, todo sin generar un déficit en las finanzas públicas ni incrementar la deuda pública el siguiente año, considera José Luis de la Cruz, director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).
Trump: Cómo lidiar con Washington
Además de insistir en tener un TLCAN favorable a EU o de plano cancelar el acuerdo, el estadounidense Donald Trump representará un reto para el próximo presidente por su postura en contra de la migración y su exigencia de que México pague el muro fronterizo que él quiere construir.
En cuanto a la migración, el más reciente episodio de tensión entre México y EU derivó de la política migratoria de «tolerancia cero» anunciada por Trump, con la que más de 2,300 niños, en su mayoría centroamericanos, fueron separados de sus padres al intentar llegar de manera ilegal a EU.
El presidente estadounidense ha dicho que «México no hace nada por nosotros, solo toman nuestro dinero y nos venden drogas. Francamente, alientan a la gente a que vaya por México y hacia Estados Unidos, porque son narcotraficantes, traficantes de personas, coyotes… Nos están llenando de verdaderas joyas».
Trump también ha señalado que sus socios del TLCAN y China tratan injustamente a su país en materia agrícola, y asegura que las barreras comerciales en contra de los agricultores estadounidenses se acabarán cuando él finalice los acuerdos comerciales.
«A los agricultores no les ha ido bien durante 15 años. México, Canadá, China y otros los han tratado injustamente. Para el momento en que termine las conversaciones comerciales, eso cambiará. Las grandes barreras comerciales contra los agricultores estadounidenses y otros negocios finalmente se romperán. ¡No habrá déficits comerciales masivos», publicó en Twitter.
El muro fronterizo también es un tema que el próximo presidente tendrá que tratar con Trump. Desde agosto de 2016, cuando el republicano aún era candidato, este asunto ha llegado a provocar confrontaciones entre él y la administración de Peña Nieto.