Al llegar a la tercera edad, la mayoría de las personas adoptan una actitud pasiva que trae como consecuencia, la falta de adaptación del adulto mayor con su propia familia y entorno.
“Aumenta la sensibilidad emocional, el temor a los cambios, la ansiedad y disminución de la autoestima, si a eso le agregamos problemas económicos o incluso la jubilación, tenemos a un adulto mayor susceptible a sentir que lo agreden, no lo valoran y le restringen actividades”, comentó la directora del centro de cuidados de día Serena Day Care by GeronTropia, Dra. Sarai Barajas.
La desinformación sobre la vejez y la falta de planes, motivaciones o expectativas suelen crear incertidumbre, tristeza o incluso omitir y restarle importancia a síntomas o signos del deterioro mental y emocional que podrían ser tratados, para así conservar la función e independencia.
La Dra. Sarai Barajas precisó que el desconocimiento los hace vulnerables, ya que el deterioro en la función cognitiva es gradual y esperado al envejecer, sin embargo, es importante identificar cuando es normal o es el inicio de una patología neurocognitiva.
“Durante nuestra vida es importante aprender a envejecer, existen muchas cosas positivas en la adultez tardía, el adulto mayor frecuentemente es capaz de comprender y mejorar las problemáticas comunes de la vida, tiene claro que el afecto es primordial y le da un valor más adecuado a las personas, situaciones y cosas a su alrededor”, especificó.
Abundó sobre la importancia de que el adulto mayor adopte un papel activo en esta etapa de desarrollo, informarse sobre el envejecimiento, confrontar los estereotipos, tomar acciones al deterioro físico y mental a través de terapias farmacológicas y no farmacológicas adecuadas y confiables por profesionales.
“Esto nos da la certeza de que sí podemos envejecer exitosamente, y que vivir las diferentes etapas nos hace afortunados y especiales”, apuntó la Directora del centro de cuidados de día Serena Day Care by GeronTropia.