Ante la necesidad de migrantes centroamericanos que conforman la Caravana Migrante, y que en gran parte buscan el asilo político en Estados Unidos, la Embajada Migrante se convertirá en un centro de apoyo y punto de acopio de víveres que serán distribuidos a los distintos albergues.
Lo anterior lo señaló el presidente y fundador de Ángeles de la Frontera, Enrique Morones, que expresó que la Caravana partió de la frontera entre el Estado de Chiapas y Guatemala, que luego de varias semanas arribó a esta frontera en busca de llegar a la unión americana.
A diferencia del año pasado, explicó, cuando la fuerza mayoritaria de la Caravana eran procedentes de El Salvador, en el recorrido más reciente gran parte de los migrantes son procedentes de Honduras, huyendo de la crisis que enfrentan en su país.
«Están escapando de la violencia y el hambre, muchos de ellos se van a quedar en México y otros van a llegar a Tijuana con el intento de pedir asilo, desafortunadamente la mayoría no van a conseguirlo», lamentó.
Resaltó el trabajo de abogados que dan servicio gratuito a refugiados, como en el caso de Nicole Ramos, de la que dijo hace una buena labor para mantener informados a los migrantes en sus solicitudes.
En el caso de Ángeles de la Frontera, Morones subrayó el apoyo económico y alimenticio que se realiza de forma permanente, así como el espacio de estadía que se les da a los migrantes en la Embajada.
El activista hizo referencia a la reciente intención del presidente de Estados Unidos, Donald J. Trump, de enviar a la Guardia Nacional a proteger la frontera con México, y la indicación a los agentes fronterizos para desestimar las aspiraciones de asilo político de parte de los migrantes.
«No se vale, hay leyes internacionales que apoyan a personas que escapan de situaciones desesperantes que piden asilo, Estados Unidos es muy culpable de lo que pasa en el mundo y deben recibir estos migrantes y tristemente no lo hacen», dijo.
Finalmente, expresó que la mayoría de los migrantes han sufrido durante el camino porque están desesperados, por lo que Tijuana ha mostrado solidaridad con esas personas, que en su mayoría están huyendo del hambre y la violencia que provoca el crimen organizado.