Es vital que las maquiladoras vigilen sus procedimientos no solo aduaneros y fiscales, sino también corporativos y administrativos, ya que alguna falla en los protocolos podría provocar la cancelación del Programa IMMEX y generar pérdidas millonarias a las compañías.
Lo anterior lo informó el Lic. Óscar Rodolfo Barreda Millán, director de Comercio Exterior de la firma Global Business Advisor (GBA), durante la reunión bimestral de Desarrollo Económico e Industrial de Tijuana (DEITAC), que preside el Arq. David Mayagoitia Stone.
El especialista explicó que el programa IMMEX permite a las maquiladoras la importación temporal de bienes necesarios en sus procesos, lo que genera importantes ahorros a las empresas, por lo que resulta importante para las mismas.
En el mismo sentido, destacó la necesidad de hacer conciencia entre los empresarios para que conozcan las causales de cancelación y las consecuencias fiscales, corporativas y de inversión que tendrían si la Secretaría de Economía (SE) determina que no tienen derecho a dicho programa.
«Hay cuestiones administrativas, corporativas, de cumplimiento de obligaciones tributarias, o el no tener una opinión favorable ante el SAT con respecto al manejo de sus aspectos tributarios, por las que se les puede cancelar”, especificó.
Barreda Millán detalló que cada año, la SE realiza una publicación de las empresas que se encuentran entre las causales de cancelación, con lo que inicia un procedimiento para que presenten pruebas de lo contrario, la dependencia las valora y aquellas compañías que se mantengan en el incumplimiento enfrentarán una cancelación definitiva.
En el mismo sentido, informó que el año pasado casi 600 de los seis mil 500 registros de Programa IMMEX activos registrados en todo el país aparecieron en el listado gubernamental publicado por la SE y fueron suspendidos; de ellos casi la mitad se enfrentó a la cancelación definitiva del programa IMMEX.
En la última publicación generada en el Diario Oficial de la Federación, se indica que un total de 208 maquiladoras perdieron su registro, de las cuales 31 fueron de Baja California.
“La consecuencia al perder el beneficio es que tuvieron que retornar plantas industriales a Estados Unidos o importar definitivamente las mismas, lo que representó una carga importante para las mismas en términos financieros, causando la pérdida de empleos”, resaltó.
Finalmente, el experto manifestó que si bien alrededor de 208 son pocas si se le compara con la cantidad de maquiladoras en México, hay que tomar en cuenta que se trata de la pérdida de inversiones considerables, que oscilan entre decenas y cientos de millones de dólares y cientos de empleos menos, por lo que es necesario conocer la normatividad vigente y no perder dichos beneficios.