Tijuana llegó a una inflación anual de 7.16% y Mexicali a 7.60%, una cifra mayor a la esperada en la primera quincena de agosto del 2017; a nivel nacional el incremento en los precios al consumidor fue de 6.59% comparado con el mismo periodo del año pasado.
Durante los primeros 15 días del octavo mes del año, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) tuvo un incremento de 0.31% respecto al periodo previo, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La mayor tasa se presentó en Ciudad Acuña (Coahuila), con 8.80% anual. “Como lo estimamos desde el 2016 por el efecto traspaso, la inflación anualizada se incrementó en la frontera norte, en ciudades como Tijuana y Mexicali”, señaló Alejandro Díaz Bautista, investigador del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
El también académico del Colegio de la Frontera Norte dijo que los productos que registraron variaciones al alza en la primera mitad de este mes fueron el gas LP, cebolla, jitomate, tomate verde, colegiaturas de preparatoria y universidad, vivienda propia, huevo y otros alimentos cocinados.
Mientras los productos a la baja fueron servicios turísticos en paquete, transporte aéreo, chayote, plátano, aguacate, chile serrano, papel higiénico y pañuelos desechables, suavizantes y limpiadores, electricidad y pepino.
El especialista detalló que en el caso del interior del índice de precios no subyacente, los costos agropecuarios mostraron un alza de 0.87% y los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno un aumento de 0.49%, según las cifras del Inegi.
Advirtió que el incremento en los precios socava el salario real de los trabajadores contratados. Aun cuando los contratos laborales incluyan cláusulas de ajuste, la efectividad de éstas para evitar la pérdida de los ingresos de los trabajadores se ve reducida, ya que los contratos se revisan esporádicamente, mientras que el aumento en los precios es un proceso continuo.
“A medida que la inflación sigue su curso ascendente, los salarios reales vuelven a caer. De esta forma, el proceso inflacionario disminuye el salario real de los trabajadores. Además no incide sobre todos los individuos por igual, sino que puede perjudicar más a los grupos sociales de bajos ingresos”, lamentó.
Desembolso de más recursos
El investigador manifestó que con el impacto en el precio de los alimentos debido a su alza en el ámbito nacional e internacional, así como los incrementos en los precios de la gasolina, los mexicanos se han visto forzados a desembolsar más por recursos básicos como son la alimentación y el transporte.
