México se verá obligado a reducir a un 30% la cantidad anual de azúcar refinada del total de sus exportaciones a Estados Unidos para evitar pagar aranceles compensatorios, y que desatará una guerra comercial que sacará de mercado a los empresarios azucareros mexicanos, acuerdo que sin duda es la antesala de una compleja renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Así lo señaló el director de la firma TLC Asociados, Octavio de la Torre de Stéffano, tras el reciente acuerdo comercial al que llegaron Estados Unidos y México en las exportaciones de azúcar.
Explicó que en esta negociación con el gobierno de Donald Trump, la industria azucarera estadounidense estuvo presionando fuerte para que los envíos de azúcar refinada se redujeran aún más.
Hasta ahora el porcentaje de azúcar refinada que México podía exportar a Estados Unidos es del 53 por ciento, mientras el 47% restante es de azúcar cruda, con lo cual estaba muy inconforme la industria azucarera estadounidense.
Los empresarios norteamericanos presionaron hasta el último minuto en las discusiones e incluso lograron que se extendieran un día más, a pesar de que el propio gobierno de Trump había fijado como plazo máximo el 5 de junio para llegar a un acuerdo final, comentó Octavio de la Torre.
Las pláticas se llevaron a cabo en Washington entre el secretario de Comercio estadounidense, Wilbur Ross, y el secretario de Economía mexicano, Ildefonso Guajardo, quienes acordaron que las exportaciones de azúcar mexicana a Estados Unidos fueran 70 por ciento cruda, 30 por ciento refinada.
Además, en dichas negociaciones México aceptó reducir la calidad de sus exportaciones al pasar de 99.5 a 99.2% de polaridad o grado de pureza de refinación, con esto, Estados Unidos se abstuvo de imponer a México aranceles compensatorios de hasta un 44%, y de esta manera las refinerías de azúcar estadounidenses quedaran más tranquilas, pues éstas argumentaron que el azúcar mexicana refinada les quita mercado.
En estas complejas negociaciones, México también tiene elementos para defenderse pues puede imponer represalias a la importación de fructosa estadounidense, que es utilizada en la industria refresquera.
Esto sustentado en la autorización que dio la Organización Mundial del Comercio (OMC) a México, para poder subir derechos a las importaciones de Estados Unidos por flujos de hasta 163.13 millones de dólares anuales por haber restringido en su momento las importaciones de atún mexicano, detalló el director de TLC Asociados.
Aunque el acuerdo reduce la cuota de azúcar de refino, uno de los aspectos positivos para la industria mexicana es que se elevaron los precios, con lo que el precio de la azúcar cruda pasará de 22.25 centavos de dólar por libra, a 23 centavos, mientras que la de azúcar de refino pasará de 26 centavos por libra a 28 centavos.
Durante tres años, los industriales azucareros de ambos países mantuvieron una disputa por el costo del azúcar y los respectivos aranceles, que a su parecer debían tener, hasta que finalmente se llegó a un acuerdo.
En este conflicto, la industria azucarera mexicana acusó que se les quería obligar a mandar azúcar de muy baja calidad para que dos empresas refinadoras de Estados Unidos la refinaran y se quedaran con el mercado, en detrimento del Tratado de Libre Comercio (TLCAN); para mayor información, Octavio de la Torre puso a disposición de los interesados la página de internet www.tlcasociados.com.mx.