El hip hop ha ido desapareciendo su connotación negativa gracias al activismo que representantes del género han hecho a través de él.
Tal es el caso de Danger Alto Kalibre, rapero oriundo de Tijuana que ha logrado ser un vínculo entre las autoridades culturales y comunidades desprotegidas en su ciudad natal.
La estrategia del cantante es llevar talleres a cárceles o a barrios bravos, para convencer a jóvenes de darle un giro distinto al destino que se les pinta.
«Nos acercamos con el pretexto del rap, pero también llevamos una plataforma con un proceso de la ONU, que son las ’12 Habilidades para la Vida’, y así les tomamos los temas de autocuestionamiento, manejo de las relaciones interpersonales, la auto educación, entre otros», explica el intérprete, quien lleva sus tareas de la mano de su crew Alto Kalibre.
De acuerdo con José Alfredo Martínez, nombre real de Danger, es a partir de las primeras rimas de sus grupos de enfoque que conoce sus entornos desfavorables y cómo debe intervenir en ellos.
«Cuando ellos empiezan a escribir, escriben sobre ir al barrio consumiendo drogas, defendiéndose de los enemigos, pero cuando quitamos estas capas llegamos a los individuos. Al final, éstos envían mensajes increíbles a chicos que están en las mismas situaciones en otros lugares», apunta.
Un buen logro del tijuanense fue su labor en el Tutelar para Menores de Tijuana, donde llegó a trabajar con jóvenes de historial complicado.
«Nos dieron al grupo más difícil y al final del taller de cuatro meses se convirtió en el grupo modelo.
«La cárcel es un lugar donde los chicos están en conflictos con la ley, donde hay que ir en un proceso muy delicado de compartir cosas, escuchar y resignificar conceptos».
Entre otros programas del artista que descubrió su talento de improvisación con música de Vico C y Control Machete, está el estudio de grabación móvil, con el que asiste a zonas marginadas y graba gratuitamente a la gente con talento.
Danger acaba de lanzar su segundo disco titulado Sembrando Laureles, en el que mezcla la filosofía de cuestionamiento político y protestante del hiphop con música del folclor mexicano.
La competición de Hip Hop Freestyle más grande de habla hispana, Red Bull Batalla de los Gallos, llegará a Guadalajara para designar a un candidato regional que represente a México en la edición 11 del enfrentamiento internacional.
El evento, donde 16 concursantes de Jalisco, Guanajuato y San Luis Potosí expondrán su calidad de improvisación con rimas, se llevará a cabo este viernes, a las 19:00 horas, en el C3 Stage.
«Es una ceremonia muy divertida, tanto para para participar como para ir a observar la capacidad que tienen los individuos de improvisar a una velocidad más grande que en cualquier otra disciplina artística.
«Esto es algo muy aparte a lo que sucede con la música urbana en los discos y en los conciertos, las batallas de rap viven por sí y para sí mismas», comparte Danger, quien fungirá como juez.