Pulso, presión, temperatura, movimiento y oxígeno en la sangre, son algunos de los sensores de signos vitales que la pulsera Eband (banda de emergencia) medirá a través del prototipo de reloj creado por Marco de Legarreta Castillo, Orlando Betancourt Morán y Fernando Arredondo de la Mora, estudiantes del de la Licenciatura en Administración de Empresas de la IBERO Tijuana.
Los creadores de este prototipo destacan que el funcionamiento de la pulsera es preventivo, pues cuenta con un ‘imei personal’ que registra información valiosa, como tipo de sangre o reacción alérgica a medicamentos, que pueden ser útiles al momento de requerir asistencia médica.
Este proyecto nace con el interés de prevenir y apoyar a algún familiar o amigo que se encuentre en alguna situación de emergencia, ya que en ocasiones por no actuar de manera rápida se tienen desenlaces lamentables.
“Creo que todos hemos tenido una experiencia… en mi caso fue un tío que tuvo un derrame cerebral y no fue hasta tres días después que se dieron cuenta; este tiempo estuvo sin que le llegara oxígeno al cerebro y lo mantuvo inconsciente en su casa, ocasionándole daño cerebral, situación que si se hubiera atendido a tiempo estuviera con buen estado de salud, es por eso que me involucre en investigar sobre el cómo o qué podíamos hacer al respecto”, expresó Fernando Arredondo de la Mora.
Detalló que se encontraron con varios proyectos, que para pedir ayuda era necesario presionar un botón, situación que lo provocó a crear algo que al momento de sentirse mal emitiera una alerta o incluso hasta una llamada con algún familiar para avisar y reportar el estado de salud.
“Mi situación también fue con un familiar, mi abuela paterna murió de un infarto y nos enteramos días después, ella vivía sola, queremos aclarar que Eband no es para curar a nadie, es más bien para prevenir alguna desgracia, nuestra intención es totalmente preventiva, hay cosas que se pueden evitar con sólo apretar un botón y en este caso es con un sensor de movimiento”, detalló el joven Orlando Betancourt Morán.
El funcionamiento de la pulsera es por medio de una aplicación previamente sincronizada, la cual manda al contacto registrado una señal sobre alguna anomalía en los signos vitales y la ubicación del afectado.
“La parte de movimiento la hicimos para caídas y choques automovilísticos, que muchas veces van solas las personas e incluso pues por el accidente no pueden avisar”, subrayó Betancourt.
“Sabemos que nuestro panorama de competencia es enorme, vemos cómo diariamente salen productos que se asemejan al nuestro, sin embargo, eso nos enriquece y nos brinda una perspectiva más amplia de cómo atacar el mercado”, expresó Marco de Legarreta.
La pulsera puede ser utilizada por un bebé o una persona adulta: “Estamos en últimos detalles para lanzarlo al mercado; de hecho, tenemos ya comprometida una entrega con un hospital particular de la ciudad de Tijuana, esperamos que el próximo mes podamos tener esa platica para la entrega final”, puntualizó Arredondo de la Mora.
Los alumnos han trabajado por más de un año con este prototipo, mismo que cuenta con la patente de utilidad y busca llegar al alcance de quienes lo requieran.