Los mexicanos dejaron de ser la mayoría de los indocumentados en Estados Unidos por primera vez en más de una década, conforme la población no autorizada cayó a uno de sus niveles más bajos, reveló hoy un estudio del Centro de Investigación Pew.
Los mexicanos han representado el más grande segmento de la población indocumentada en Estados Unidos y la mayoría desde por lo menos el año 2005, pero sus números se han estado encogiendo desde su récord de 6.9 millones en 2007 a 5.6 millones en 2016, de acuerdo con el más reciente recuento de Pew.
“De acuerdo con la estimación preliminar del 2016, aunque el número de inmigrantes indocumentados de México sigue siendo el mismo… su proporción cayó al 50 por ciento del total, lo que marcaría la primera vez desde al menos 2005 que los mexicanos no son la mayoría de la población no autorizada”, indicó.
Por comparación, los mexicanos indocumentados representaron el 57 por ciento de la población no autorizada en 2007, el 52 en 2014 y el 51 por ciento en 2015.
El estudio del Centro Pew muestra que el número total de inmigrantes indocumentados de todas las nacionalidades que residen en Estados Unidos se ubicó en 11 millones de personas, un nivel por debajo del total de 11.3 millones existente antes de la Gran Recesión de 2009.
Se trata, de acuerdo con el Centro Pew, de una disminución pequeña pero “estadísticamente significativa”.
La población indocumentada incluye no sólo a quienes ingresaron de manera ilegal a Estados Unidos, sino también a aquellos que entraron con una visa válida pero incumplieron el plazo de salida del país.
Desde 2013 incluye además a los “dreamers” o beneficiarios de Programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA) de la administración Obama, que ha beneficiado a unos 750 mil jóvenes indocumentados, la mayoría mexicanos.
En contraste, añadió, aquellos indocumentados que fueron deportados, salieron de manera voluntaria, regularizaron su situación migratorio o murieron, son descontados del número total de la comunidad no autorizada.
Una de las nuevas tendencias detectadas por el Centro es el aumento de la probabilidad de que un indocumentados viva junto con sus hijos nacidos en Estados Unidos, una proporción que ha aumentado del 30 por ciento en 2000, al 39 por ciento en 2014.
El estudio hizo notar que, en la medida que ha decrecido el número y la proporción de mexicanos indocumentados en Estados Unidos, ha aumentado el número y la proporción de inmigrantes no autorizados procedentes de otros países del mundo.
Aunque el número de inmigrantes no mexicanos bajó de 5.3 millones a 5.0 millones entre 2007 y 2009, sus cifras volvieron a crecer después de la Gran Recesión y ascendieron a 5.4 millones de personas en 2015 y a 5.7 millones en 2016, de acuerdo con las estimaciones preliminares del Centro Pew para este último año.
Los inmigrantes procedentes de Centroamérica y de Asia constituyen, en ese orden, los dos grupos más comunes de personas sin documentos migratorios después de quienes llegaron de México.
El Centro Pew estimó que alrededor de 1.8 millones de inmigrantes indocumentados de origen centroamericano, un incremento de 180 mil personas en relación con las cifras de 2009.
En el caso de los inmigrantes indocumentados asiáticos, el número aumentó a 1.5 millones de personas en 2015, un alza de 220 mil respecto a 2009.
La población indocumentada de origen europeo se ha mantenido sin cambios en alrededor de 550 mil personas.