El poder y la avaricia son tentaciones difíciles de controlar
La sociedad moderna confunde la esencia de los bienes materiales. Insisten que el dinero es básicamente un fin en sí, olvidando la posibilidad de que éste, es tan solo un recurso para poder vivir y poder ayudar a los demás a ser mejor. Esta confusión hace que la gente sobre valúe lo material, perdiéndose en el camino del poder, la avaricia y la arrogancia.
Hasta la persona más sencilla y humilde cambia en el momento que tiene la posibilidad de recibir una suma importante de dinero. No importa cómo o por qué obtuvo ese dinero…en una sociedad materialista compra lujos, comodidades y ofrece estabilidad, confianza y en casos hasta compra dignidad. El dinero definitivamente cambia a las personas.
Hay gente excepcional que gracias a que tienen dinero son personas sensibles, altruistas que utilizan su fortuna para vivir bien y compartir con los demás, ayudan a otros creando oportunidades extraordinarias.
Sin embargo, hay otras personas que ven la oportunidad de tener dinero y se convierten en unos cerdos, desconocen hasta a su sangre, con tal quedarse con todo. Dinero que no hicieron con su trabajo y aun así, se sienten herederos privilegiados. Así se convierten en seres irreconocibles capaces de hacer cualquier cosa, quitan, mienten, y hasta roban, justificando sus acciones con el derecho de ser los herederos.
El valor humano y felicidad no son proporcionales a la cantidad de las pertenencias materiales de cada ser”.*Prohibida su reproducción total o parcial sin el permiso escrito del editor y sin citar la fuente.
Cuántas familias no se han peleado por la culpa del dinero. Riñas de hermanos, rivalidades, envidas y hasta traiciones.
Tristemente cuando surge un conflicto dentro de la familia por cualquier cuestión económica, la rabia, y hasta el odio, se apodera del alma de todos y la gente cambia. El hombre que nuca tuvo ni un centavo, se venga del maltrato que recibió cuando era pobre. Unos hermanos que parecían unidos ahora se acusan mutuamente. Los primos, que no solían reclamar, ahora no pueden ni hablarse. Un hijo incluso puede llegar a pensar que su padre es muy avaro porque no le agrada lo que dejo en su testamento.
Hay personas que insisten que son más respetables y mejores personas solamente porque tienen más dinero, no importa si este lo obtuvieron por una oportunidad donde se aprovecharon o engañaron. Utilizan el dinero como símbolo de poder y de control. De hecho, hasta creen que por tener dinero pueden juzgar, criticar y hasta ofender ya que tiene recursos para justificarse.
En cambio la persona que no tiene, desafortunadamente no cree que tiene voz, ni se puede defender ya que a nadie le interesa escuchar a alguien que no tiene una buena posición.
No se puede negar que el dinero es importante para muchas cosas. De hecho es necesario hoy en día para vivir. Sin embargo no se le puede, ni se debe sobrevaluar. Si bien es un medio para superar una crisis familiar, para pagar una deuda, para cubrir los gastos y proteger a los hijos en cualquier instancia (estudio, alimento y salud). El tener más dinero NO es nuca un indicador de que se es mejor persona.
Valor humano
Ingredientes:
2 manojos de amor propio- Nutrir y respetar la autoestima
1 taza de gratitud – reconocer y agradecer las bendiciones personales
1 taza de alegría – sentimiento de goce y energía positiva por vivir
2 cucharadas de disciplina – acciones ordenadas y continuas para conquistar metas
1 cucharada de esfuerzo y disciplina – fuerza de voluntad, estudio y superación continua
Recomendación del chef
Valora a las personas por lo que son, lo que hacen y lo que ofrecen, no por cuanto dinero tienen. Recuerda que las personas felices son muy pocas y su felicidad finalmente no depende de lo que poseen.
- No se le puede poner precio a la gente. Valorar a las personas por lo que tienen, es reducirlas a un darles un precio cuantitativo, cuando en realidad la gente vale por su calidad de ser, de pensar y de actuar.
- Cuando se elige el dinero sobre todo lo demás, la vida pierde su valor. Cuando uno se enfoca en cuanto dinero tiene, nunca hay una cantidad que satisfaga, siempre se quiere más y no hay nada que satisfaga este deseo. Más no significa estar mejor, simplemente es más.
- El dinero no da todo. El patrimonio económico ayuda cuando se le reconoce como un medio o una herramienta para trabajar, vivir y lograr la misión personal. Pero una persona debe de estar consiente que se puede tener mucho dinero y aun no tener nada.
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