Serendipity significa ‘encuentro afortunado’ o ‘afortunada sorpresa’. Este fue el nombre que exploradores en los años de 360 A.C. le dieron a Sri Lanka, en ese entonces la isla de Ceylon, al encontrarse con sus miles de maravillas, escondidas en su densa vegetación.
Aquí me hospedé en un hotel de la lujosa cadena Jetwing, que ya cuenta con 25 hoteles. Ubicado en una extensa playa de arena blanca, Jetwing Beach tiene dos grandes albercas y vistas espectaculares al Oceano Indico. Diseñado por el internacionalmente reconocido arquitecto de Sri Lanka, Geoffrey Bawa, el hotel es un ejemplo de un paraíso tropical.
Jetwing Vil Uyana rinde homenaje la belleza. Sereno, parece casi sentarse en silencio, escondido entre las llanuras de su propia sombra. Aquí, sentí que viajé 2000 años atrás, a un tiempo sencillo y espiritual. Entre atardeceres y cantos de ave, se encuentra la paz.
Desayunar los típicos String Hoppers con curry maridado con el te Ceylon cada mañana, frente a la laguna y de espaldas a la impactante pared tradicionalmente pintada con elefantes , (este es el país asiático con mas elefantes )- fue una experiencia única. Aquí tuve el gusto de cenar delicioso y platicar con Indika, el encantador gerente general del hotel, que me contó sobre la bella religión budista, que predomina en Sri Lanka y que es vista mas bien como una filosofía de vida.
En un proyecto increíblemente innovador, Hoteles Jetwing creó una reserva natural privada que consiste en un sistema de manglares con lagos. Jetwing Vil Uyana se construyó dentro de estos entornos con habitaciones dentro de los arrozales. Este único hotel creó un enfoque único para la eco-vida, un ambiente de sencillez rural combinado con las comodidades lujosas, creando una experiencia difícil de olvidar.
El lobby es una obra de arte, donde estanques con flores de loto rodean un camino de piedra hacia la sala principal del hotel, donde su gran alberca sobrevuela el manglar. A lo lejos se asoma la impactante roca de Sigirya, imponente desde la distancia.
Sri Lanka, con sus stuppas, templos, monjes, lagos, restaurante, hoteles y gran cantidad de monos es un lugar como ninguno en el mundo, donde nos podemos topar, entre su densa vegetación, con maravillas inigualables.
