Comerciantes turísticos de la Avenida Revolución calificaron que las nuevas medidas de cruce empleadas en las garitas no inhiben el turismo y desarrollo económico, mientras se realicen con respeto y de forma ágil.
Los comerciantes realizaron dos recorridos por cuenta propia en el cruce peatonal fronterizo de San Ysidro a Tijuana, debido a las afectaciones económicas que se presentaron el fin de semana antepasado donde las ventas cayeron un 30%, y las cuales se atribuyen a la apertura de la nueva garita peatonal mexicana y la obligación de presentar un pasaporte del país de origen, además de identificación oficial.
“En el trayecto pudimos observar que las instalaciones causan una buena impresión, que todo se desarrollaba de manera normal, que no había largas filas de personas, que la revisión era ágil, que los y las agentes brindaban un trato amable a todo aquel turista o paisano que ingresaba por ese punto de inspección de ingreso a México.
El presidente de la Asociación de Comerciantes de la Avenida Revolución, Julián Palombo Saucedo, comentó pudieron observar que quienes cargan con maletas, bolsas, etc. pasan por una línea especial en la que presionan el botón de un semáforo, que si le toca luz verde, pasa sin revisión, y si es roja, pasan al lado izquierdo para que le revisen todas sus pertenencias, a diferencia de algunos turistas que externaron las revisiones eran en general, y que estas provocaban, además de molestias a los turistas, largas filas de personas para internarse a México, y no aleatorias.
Además constataron hay otro módulo por el que pasan connacionales que no tuvieran nada que declarar, y otro más para extranjeros a quienes les solicitan el documento que los acredita para poder internarse al país, mismo que observaron eran fluidos.
Debido a estas observaciones, los comerciantes consderaron las medidas no deben ser factor de inhibición para el turismo, sin embargo aclararon, saben que hay muchos extranjeros que son residentes legales en Estados Unidos que solo necesitan su Tarjeta de Residente Permanente para entrar de regreso a ese país Americano, y que solo tramitan pasaporte de su país de origen, cuando van a viajar fuera de Estados Unidos, o cuando van a renovar su tarjeta de residente legal del país.
Ante esta situación y para no afectar el desarrollo económico de la frontera, la asociación de comerciantes solicitan a la autoridad migratoria se otorgue un plazo de cuando menos un año, para que los turistas extranjeros se les permita internarse a la franja fronteriza, como lo han hecho durante más de cien años.
Palombo resaltó se debe de desplegar una campaña de información a través de todos los consulados mexicanos, principalmente en los estados de California, Nevada y Arizona, que son los principales proveedores de turistas a nuestra frontera, las nuevas disposiciones migratorias del gobierno de México, para que quien planee visitar no sufra contratiempos por la falta del documento que lo acredite internarse.