Contexto
Respetarse a uno mismo es un trabajo indispensable para vivir en armonía con uno y con los demás. Atender y satisfacer las propias necesidades y valores, expresar y manejar en forma conveniente nuestros sentimientos y emociones, sin hacernos daños ni culparnos, es elemental para encontrar el equilibrio; por ello debemos buscar y valorar todo aquello que nos haga sentir orgullosos de nosotros mismos.
Constantemente nos quejamos de que otros nos faltan al respeto sin darnos cuenta de que es más frecuente que nosotros mismos, lo hagamos, incluso, de manera inconsciente. Por otra parte, la dignidad humana es aquella condición especial que reviste toda persona por el simple hecho de serlo y se caracteriza en forma permanente y fundamental desde la concepción hasta la muerte; es decir, que no se puede renunciar a ésta y existe porque, a diferencia de los animales, tenemos autodeterminación y ésta se obtiene viviendo con honor, buena reputación y alejados de los ultrajes o humillaciones.
FUENTE: Prezi.com
El abuso emocional se presenta frecuentemente en la vida de casi todos los seres humanos. Éste puede ocurrir desde el seno familiar, a una edad muy temprana y se extiende cuando ya somos adultos a través de nuestras relaciones de pareja, primero en el noviazgo y después en el matrimonio. A diferencia del abuso o la violencia física, que suele provocar moretones, hemorragias y un dolor tangible, el abuso emocional ocasiona en quien lo sufre tremendas consecuencias devastadoras y duraderas, por lo que recuperarse de él requiere de un esfuerzo verdaderamente mastodóntico.
Y es que cuando sufrimos de abuso emocional (a cualquier nivel), lo primero que se ve impactado es el respeto que sentimos por nosotros mismos. Permitir que una persona a la que le profesamos amor nos lastime y nos humille, en primer lugar habla de un gigantesco desbalance emocional individual, porque estamos desarrollando un apego o dependencia extremadamente dañino que, de poco en poco, va minando nuestra autoestima, atentando contra nuestros valores individuales y también contra nuestro amor propio. Negociar la dosis afectiva que requerimos a diario a cambio de golpes (físicos o emocionales) irremediablemente nos postra en una posición de indefensión, pero también de una tremenda falta de respeto hacia nosotros mismos.
En este mismo espacio hemos hablado sobre los llamados “matrimonios por conveniencia”. Cuando una persona, hombre o mujer indistintamente, acepta involucrarse en una dinámica de esta índole, en automático se está faltando al respeto, pero también se está ubicando en una posición de riesgo constante, porque negoció su bienestar, su estabilidad e, incluso, su integridad (física, psicológica y emocional) a cambio de muchísimas cosas que en el inmediato, corto, mediano y largo plazo la van a lastimar irremediable e irreversiblemente.
Perdernos el respeto a nosotros mismos y a nuestra pareja habla muy mal del bagaje que nos formó como personas. Pone en evidencia la educación que recibimos en el seno familiar y nos ubica en lo más bajo de la escala humana, porque, si lo reflexionamos por unos instantes, un individuo sin respeto por sí mismo, sin amor propio, sin dignidad, sin valores, difícilmente será capaz de prodigar a los demás entornos emocionales positivos.
Si no nos queremos y si no nos respetamos a nosotros mismos, obviamente seremos incapaces de querer y respetar a los otros. Por ello, es trascendental que, en el caso de que ya tengamos hijos los podamos educar inmersos en una cultura de la aceptación y respeto hacia los demás a través del respeto y la aceptación hacia ellos mismos. El temor, la envidia y el desprecio son ingredientes que no los van a definir como seres humanos, pero sí como sujetos de odio, de insulto, de desconfianza y de egoísmo. Debemos fomentar relaciones saludables en nuestra vida y rodearnos de personas positivas; en especial, también necesitamos ser capaces de ejercer el perdón, porque éste nos enseña a ser buenos con nosotros mismos pero, sobre todo, a ser respetuosos de lo que somos y de lo que son los demás.
Y no olviden que todos los sábados los espero, en punto de las 23:00 horas, en su programa Exclusivo para hombres, que se transmite por Telefórmula (121 de Cablevision y 121 de Sky).
Ray Rice: un animal deleznable
Hasta el lunes se ganaba la vida como corredor de los Cuervos de Baltimore, una franquicia profesional de futbol americano en Estados Unidos, pero después de que la cadena gossip de entretenimiento TMZ lo exhibió a través de un video golpeando brutalmente a su esposa en el elevador de un casino en Atlantic City, Nueva Jersey, Ray Rice fue despedido de su equipo, suspendido indefinidamente de la NFL y ahora varios grupos de activistas en pro de la defensa de las mujeres y de la familia están presionando para que también vaya a la cárcel y pague por esta salvaje agresión. ¡Se lo merece, por infeliz!
La opinión de los cibernautas vía Facebook
- Alejandro Pérez
“Hay hombres y mujeres a quienes les urge tratamiento psiquiátrico, pues de no ser así seguirán comportándose como lo hacen. La agresión a esta mujer puede recalar en los llamados ‘matrimonios por conveniencia’ (de los que ya hablaste)… sólo que a ella le salió muy caro”. - Ignacio Toledano
La violencia, provenga de quien provenga, del hombre o de la mujer, es inaceptable, sean o no figuras públicas. Una persona madura se ocupa de este tipo de situaciones de forma más específica, pidiendo ayuda psicológica o legal”. - María Teresa Gamboa
“Algunos estudios se han ocupado sobre lo qué significa estar en medio del pánico total. Se trata de una enfermedad y si no se pide ayuda o no cortas de raíz con con el agresor, puede llegar hasta la muerte”.
Consultorio (NO) sexual
- Pregunta:
Llevo cuatro años de casada con un hombre que, a fuerza de ser sincera, no me da buena vida. Me maltrata a distintos niveles (física, psicológica y emocionalmente), pero por alguna razón que desconozco no soy capaz de alejarme de él. Lo he intentado en un par de ocasiones, pero apenas lo hago me siento verdaderamente mal: se me presentan episodios de ansiedad, me da insomnio, comienzo a comer compulsivamente… sé que estoy muy mal, pero no sé qué hacer.
Viridiana Ruiz (México, Distrito Federal). - Respuesta:
Lo que tú padeces es una severa dependencia emocional, que es un estado psicológico que se manifiesta en las relaciones de pareja y éstas son sumamente inestables, destructivas y desequilibradas. Tienes que buscar ayuda profesional de manera inmediata. Suerte.
¿Qué escuchar?
Respect
ARETHA FRANKLIN, 1967
Para su undécimo álbum de estudio, titulado I never loved a man the way I love you, La Dama del Soul decide incluir un tema compuesto por Otis Redding que a la larga se convirtió en todo un himno.
¿Qué leer?
¿Amar o depender?
2012
Amar no implica desaparecer, sino integrarse en el otro. El amor sano es una suma de dos en la que nadie debe perder. Lamentablemente, millones en todo el mundo son víctimas de relaciones tóxicas. Por eso deben leer este libro de Walter Riso.
¿Qué ver?
Jerry Maguire
1996
Dirigida por Cameron Crowe y finamente actuada por Tom Cruise, esta cinta nos adentra al microcosmos de un hombre que tiene que caer a lo más bajo para descubrir que sólo puede salir de donde está respetándose a sí mismo.
