Surcando los cielos con mucho estilo y con un “savoir faire” especial, así lo hacen los aviones de Air France, que conforme pasa el tiempo siempre busca la manera de renovar y de seducirnos en cada vuelo. Claro que sí, pues viajar no es nada más subirse a un avión y esperar llegar a un destino. Estar dentro de una aeronave puede convertirse en una especie de ritual para hacernos sentir cómodos y enamorarnos de una aerolínea.
Y yo estoy encantada con Air France, ya que cada vez que vuelo en ella la paso genial entre la comodidad que ofrece, el gran servicio y las copas de vino y champagne con las que me deleito. Es una especie de romance que existe entre esta aerolínea francesa y yo, y seguramente con muchos de quienes han volado con ellos.
Y ahora vienen con algo nuevo. Air France presentó como serán sus nuevos asientos Business, buscando renovar la experiencia de viaje. En total, entre junio de 2014 y 2016 se instalarán 2.102 asientos Business en 44 Boeing 777, el principal modelo de la flota de larga distancia de Air France.
Air France modeló el nuevo asiento hasta en los más mínimos detalles, lo que le brinda un diseño único. Elegante y de líneas agradables, el asiento se viste de colores delicados y envolvente.
Este asiento de acabados particularmente esmerados (cuero, elección de las telas, pespuntes) brinda una comodidad absoluta durante el viaje para disfrutar de una noche reparadora.
El nuevo asiento Business de Air France se desarrolló en torno al concepto de las 3 F :
Full flat El asiento se transforma en una cama perfectamente horizontal para atenuar los efectos del desfase horario (jetlag)
Full access Acceso directo al pasillo, sea cual sea la situación del asiento en la cabina.
Full privacy Espacio preservado gracias a las curvas envolventes del asiento, una verdadera burbuja privada en pleno cielo
Diseñado especialmente para Air France, este asiento se desarrolló en colaboración con Zodiac Aerospace, un líder mundial de la fabricación de asientos de avión. Su diseño único fue realizado por Mark Collins de Design Investment, empresa especializada en el sector del transporte de lujo, y Brandimage, agencia asesora en diseño y branding.
En clase Business, los pasajeros de Air France dispondrán de una amplia pantalla táctil con imagen de alta definición, a través de una pantalla de 16 pulgadas que ofrecerá una experiencia de navegación única a bordo, tan sencilla como en una tableta.
Contará con una interfaz gráfica totalmente rediseñada y disponible en 12 idiomas (francés, inglés, español, portugués de Brasil, chino, japonés, coreano, alemán, italiano, holandés, ruso y árabe).
La región de Bordeaux es seductora, encantadora, elegante, a veces arrogante, pero también campesina y rural… tiene muchas facetas. Refleja el espíritu de Bordeaux y del bordeaux, un espíritu fruto del contacto entre aristócratas y campesinos, mercaderes ingleses y holandeses, y vendimiadores. Si se sale de la ciudad y decidimos tomar cualquier dirección, nos encontraremos en medio de vides.
Cada château, cada cru, cada denominación posee una personalidad y originalidad únicas.
El viñedo en Bordeaux está dividido por dos ríos en forma de Y. La rama de la derecha es el Dordoña, y la izquierda el Garona. La zona a la izquierda de esta Y es la zona “clásica”, la que se clasificó en 1855, y donde están los grandes châteaux pertenecientes a la nobleza: Graves y Médoc. La zona a la derecha, el Libournais, es menos antigua y más “plebeya”, dominada por Saint-Emilion y Pomerol: tan plebeya que ni siquiera era considerada a la hora de las clasificaciones del viñedo. El área entre los palos de la Y se llama “Entre dos mares”.
Y para probar algunos vinos de estas maravillosas tierras, Vinoteca organizó un espléndido evento con grandes personalidades venidas desde Bordeaux y celebramos una exclusiva cata con botellas de dicha región francesa, reconocida a nivel mundial por la excelencia de sus vinos.
El lugar elegido fue Au Pied de Cochon, en donde tres expertos prepararon una perfecta comida maridaje. Ellos fueron: Frédéric Lobjois, chef de cuisine; Fabrice Bottois, gérent de restaurant y Pedro Poncelis, maître sommelier.
El menú degustación consistió en:
- Ensalada de endivias con peras y nuez de macadamia en aderezo de queso roquefort
Château de Fieuzal Blanco 2010, Pessac Léognan - Carpacio de salmón y robalo al aroma de tomillo
Château de Fieuzal 2007, Pessac Léognan - Ensalada de bogavante con vinagreta de coral de estragón
Château Giscours 2006, Margaux - Foie gras de pato sellado con frutos rojos salteados
Château du Tertre 2006, Margaux - Risotto con trufa negra de Norcia
Château Beychevelle 2008, Saint Julien - Filete de robalo a la parrilla, puré de papa, manzana rostizada, salsa de morillas al Calvados
Château Lynch Bages 2007, Pauillac - Costillas de cordero, hinojo a la parilla y brocheta de verduras confitadas
Château La Conseillante 2007, Pomerol - La selección de casaras de helado y frutos exóticos
Château Doisy-Védrines 2008, Sauternes