Hoy en día la gente es cosmopolita y ecléctica en sus gustos: se preocupa por expresar su personalidad a través de los objetos y aromas que usa, de los lugares que frecuenta, de los platillos que paladea, de los deportes que practica de las bebidas que saborea y de los automóviles que conducen.
Hablemos de los aromas, estos nos salen al paso, y muchas veces no los advertimos, casi parecemos indiferentes a su presencia, necesitamos detenernos un momento cuando nuestro olfato percibe el rastro fugaz de un olor. En el agobio del día la huella del café recién molido de pronto nos hace sonreír, el tiempo se detiene, también nosotros nos detenemos un momento, queremos llenarnos de placidez, de ese placer sencillo, en el que el aroma del café nos coloca en un instante; Apenas y nos damos cuenta de que la ensoñación nos ha atrapado, la infancia, momentos particulares de nuestra propia vida que hemos compartido con otros desfilan por nuestra memoria. Aspiramos profundo, soltamos el aire con una exclamación, podemos sentarnos a degustar una taza de café o continuar nuestro camino, pero ese instante y ese aroma quedaron impresos en nosotros. Entonces la mañana o la tarde se hacen menos pesadas, menos arduo nuestro trabajo, solo basta un instante, nuestro olfato nos hizo cobrar conciencia de que estamos vivos, de que la realidad está llena de experiencias sencillas que se convierten en extraordinarias…es la experiencia que se vive, apenas se cruza el umbral del hotel Encanto en Acapulco con su aroma sensual y seductor, ademas el hotel posee una espectacular arquitectura, al igual la decoración, la vista y la comida, en este espacio chic, trendy, romántico y relajante enclavado en un punto único del fraccionamiento Brisas Marqués, con una vista espectacular y privilegiada de la bahía, me siento en un remanso de tranquilidad, paz y luz, de arquitectura única, que permite encontrarse con el océano en cada rincón y experimentar a cada paso una sensación nueva..el Encanto ofrece una nueva dimensión en complejidad y carácter, la maximización de un placer, que se logra a traves del perfecto equilibrio.
La arquitectura serena y humana combina espacios abiertos y cerrados, al tiempo que delinea trazos largos y contundentes que casi siempre delatan a lo lejos el océano. Cada rincón provoca una sensación, cada paso es una oportunidad para descubrir y admirar el mar, y cada espacio es un remanso de privacidad que invita a la contemplación.
El lounge invita a relajarse y vivir la noche sutil de Acapulco en un ambiente refinado que tiene como toque final una vista espectacular tanto de la bahía de Acapulco como de la bahía de Puerto Marqués.
La música es cuidadosamente seleccionada, para seducir a sus visitantes con ritmos africanos, acentos brasileros y las últimas texturas de la música francesa.
Su restaurante Origen es de ambiente sofisticado, elegante y relajado con una terraza al aire libre que le dan un toque muy romántico con la espectacular vista al mar y en las noches pareciera que la luna acaricia el océano.
El vino también debe lograr un buen equilibrio entre la intensidad de la fruta y la guarda en barrica, Las iridiscencias del vino, centellan ; iluminan las estancias y crean un tiempo distinto, el del viaje a través de los sentidos ; son la memoria y la imaginación las que despiertan, se entrelazan buscando donde acomodarse en un placer en el que los matices de nuestros sentimientos toman cuerpo, nos recorren la piel y los sentidos… desde que se escancia y se acerca a los labios: sus aromas nos inundan de imágenes entrañables que despiertan tonos que van de la melancolía hasta el gozo más intimo.
La uva, con la que varios vinos están elaborados es la Cabernet Sauvignon, que actúa como columna vertebral de algunos de los vinos más famosos del mundo. ¿Y por qué columna vertebral? Gracias a su potencial alcohólico, su textura, nivel de acidez, y taninos (astringencia), el vino generado por esta noble uva sostiene durante largos años la estructura de un vino tal y como la columna vertebral sostiene a un cuerpo.
La uva Cabernet Sauvignon, da origen a los indiscutiblemente bien llamados reyes de los vinos tintos. Uvas esféricas pequeñas, de piel gruesa y carne cerrada, adaptables a cualquier zona vitivinícola en el mundo y que se comenzó a cultivar ordenadamente en la zona de Burdeos en Francia hacia principios del siglo 18, en concreto en la zona de Médoc donde mezclada con las uvas Merlot, Cabernet Franc y Petit Verdot da lugar a grandes vinos en el mundo.
En Mexico un excelente exponente del cabernet es el Chateau Domecq custodiado en barricas y guardado en cava alumbrada con una tenue luz amarilla que no afecta el proceso de vinificación; y el sistema de ventilado permite la constante renovación del aire, evitando así, la acumulación de olores inadecuados y permitinedole al vino envejecer y mejorar.
El Chateau Domecq te seduce y enamora con su abanico de aromas a vanilla, madera y dejo de café que te envuelven y encantan y Dicen por ahí, que el mejor compañero del hombre es el vino. Y el mejor compañero del vino es el agua, especialmente si se trata de San Pellegrino.
Esta es una marca italiana de agua mineral, la cual es obtenida de un manantial termal en los Alpes, en un nacimiento cerca de la ciudad de Bérgamo y tiene su origen 400 metros bajo la superficie, donde se mineraliza cuando hace contacto con rocas volcánicas. Son pocas las condiciones geológicas que pueden producir agua naturalmente carbonizada, en su mayoría provienen de actividad volcánica. San Pellegrino ha sido producida por mas de 600 años y hoy en día, la marca también produce variedades de agua con sabor, como la Aranciata, a la que se agrega jugo de naranja.
Desde la época medieval esta agua era muy famosa. Se cuenta que Leonardo Da Vinci viajo en 1509 a San Pellegrino para probar su milagrosa agua. Aguas naturalmente carbonizadas han sido buscadas energéticamente a través de los siglos, por sus propiedades curativas.
Este esplendido maridaje lo probamos en el el WA, un lugar que sigue la tendencia casual y a la vez regala una decoración chic y elegante, ya que desde la entrada se percibe un cálido y misterioso ambiente que te transporta al Oriente. Con muebles de madera en tonos claros, grandes cristales con una maravillosa vista a una de las avenida más lindas de Mexico, Palmas.
El lugar cuenta con sofisticadas mesas Teppanyaki, en donde el chef prepara las más selectas delicias orientales, Wa es una fusión de lo mejor de la cocina japonesa contemporánea y tradicional ya que ofrece un amplio menú donde se puede degustar una gran diversidad de los ya conocido y tradicionales rollos de sushi de finísimos ingredientes y los clásicos sashimis y kushiyakis.
Un buen vino es la «Obertura» insustituible de la fiesta gastronómica: es la gestualidad que equilibra el arreglo de una mesa, el estímulo de los sentidos, y el mejor pretexto para la convivencia cordial de la Buena Mesa.
Debemos dejarnos seducir por sus sabores y aromas, podemos encontrar el placer del buen vino en cualquier momento y en cualquier lugar, quien disfruta de esto sabe que a lo largo de la vida necesita experimentar, estar abierto a la sorpresa, podemos adentrarnos en experiencias cada vez más profundas, un buen conocedor de vino es el que busca y experimenta para reconocer las cualidades del vino que degusta.