Hasta mediados del siglo pasado, en Riviera Nayarit se diseminaban un puñado de pueblos de pescadores que intentaban sobrevivir en medio de un paisaje de cactus y arena, agreste y singular, era el refugio de esas estrellas de Hollywood que encontraban en sus desoladas playas y su rústico entorno un paraíso donde descansar en el anonimato, lejos de la mirada de paparazzi y curiosos. Hoy, Riviera Nayarit es uno de los destinos estrella de nuestro país, la suma de clima agradable, playas de arena fina y blanca, mucha y buena cocina, decenas de actividades al aire libre, y una movidísima vida nocturna.
Este fin de semana de puente lo pasé fenomenal en el Grand Velas Riviera Nayarit en compañía de los embajadores de Rusia, Valery Morózov; de Francia, Daniel Parfait; de Alemania, Edmund Duckwitz; de Noruega, Arne Aasheim; de Japón, Shuichiro Megata; de Colombia, José Gabriel Ortíz Robledo, y de Brasil, Marcos Raposo Lopes. El gran ausente fue el embajador de España, D. Manuel Alabart Fernández-Cavada, quien sufrió una fractura en un pie y no pudo acompañarnos, y a quien le deseo una muy pronta recuperación.
Todos ellos realizan una labor diplomática extraordinaria y nos han hecho conocer un pedazo de sus países, en esta ocasión disfrutaron ellos de las bellezas y delicias del nuestro.
También estuvo con nosotros Cristina Pineda, la encantadora esposa del embajador de Francia, quien es la reconocida artista y empresaria mexicana, fundadora de Pineda Covalín; además, colabora con diversas marcas internacionales. Ha participado también como ponente en congresos internacionales de diseño en Europa y América.
El hermoso lugar que nos acogió fue el Grand Velas All Suites & Spa Resort Riviera Nayarit, ubicado en la extraordinaria Bahía de Banderas en Nuevo Vallarta, nos ofreció todo su lujo y comodidad, así como su espléndida gastronomía. El servicio fue extraordinario y no perdieron ningún detalle, fueron unos días de consentimiento y de mimos totales.
En cuanto a la gastronomía, los reconocidos chefs hacen de cada platillo una creación única para deleitar utilizando los mejores ingredientes y fusionando diversos sabores presentados artísticamente. Su cocina gourmet nos ofrece opciones de diferentes regiones como el Mediterráneo, Francia, Italia y México en los restaurantes 4 diamantes de este resort: Frida, Lucca, Piaf y Azul.
El Grand Velas es el único resort Todo Incluido de Lujo en el mundo entero diseñado para vacaciones familiares y ha sido galardonado con los Five Diamonds Award de la AAA, privilegio que lo hace único en su clase por su nivel de excelencia en instalaciones y servicio personalizado de gran nivel. Sin duda la mejor opción para vacaciones familiares o en pareja, e, indudablemente, una excelente opción para grupos y convenciones.
Aunado a este galardón, Grand Velas continua recibiendo reconocimientos y premios a nivel internacional confirmándolo como el grand resort spa de lujo en México. Entre estos premios recibidos están el otorgado por la prestigiada Guía Condé Nast Johansens como El Mejor Spa Hotel de México; y la Conferedación Mundial de Negocios (World Confederation of Businesses) lo ha distinguido con el Bizz Awards que reconoce a las mejores empresas de cada país por su excelencia empresarial demostrada a fin de motivarlas y estimularlas a seguir por el sendero del éxito y la reconocida Guía de Trip Advisor Travelers Choice Award que le ha premiado también como uno de los Top 100 Best Luxury Hotels del mundo.
Con los embajadores de Alemania, Colombia y Rusia tomando Graffigna
El fabuloso fin de semana se completó con la cena en Piaf con el encantador gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval, y su esposa, Ana Lilia López de Sandoval. Él está realizando una labor increíble en el estado en cuanto a desarrollo y turismo, hace poco, entre Jalisco y Nayarit se lograron los acuerdos para organizar el Tianguis Turístico (en marzo), el Foro Económico Mundial para América Latina y la Regata de la Copa México. Se tienen montón de planes de los cuales les iré contando poco a poco.
Además de charlar largamente de nuestros respectivos países, disfrutamos del increíble espectáculo de avistamiento de ballenas en la Bahía de Banderas. También visitamos Sayulita, un pequeño paraíso adornado por la hermosura del mar, la reciedumbre de los acantilados, los ríos, las lagunas y los esteros plenos de vida marítima, las playas plácidas de arena blanca y una exuberante fauna. Todos quedamos encantados con este lugar.
Y por si fuera poco, organicé para los embajadores una cata con los maravillosos vinos Campo Viejo Gran Reserva que los deleitó con una entrada suave, taninos dulces y elegantes; Ysios, un riojano bien estructurado vanguardia y de gran expresión; el Reserva Magna, un elixir mexicano, aterciopelado y redondo con largo final, y Santiago Graffigna, argentinio intenso y profundo con rica y compleja boca,
Fueron unos días en donde el ambiente del Pacífico mexicano, las anécdotas internacionales, el lujo, el maravilloso spa, la gastronomía y los buenos vinos fueron los complementos perfectos para el disfrute total. Vale la pena visitar uno de los destinos más exclusivos de México. Ese mismo que hace 50 años no era más que agua azul y ballenas enamoradas.
