El Comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Tonatiuh Guillén, asegura que el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, hace uso político-electoral de las caravanas migrantesdesde el año pasado.

En entrevista, el expresidente del Colegio de la Frontera Norte advierte que el discurso del mandatario estadounidense también promueve la xenofobia y aprovecha los flujos de personas “en el sentido más vulgar”.

“Hay un uso político de esta movilidad de personas, de las caravanas en particular, un uso político desde el año pasado, de manera muy evidente por parte del Partido Republicano y en especial del Presidente Trump”, afirmó.

“El día que ya no tenga personas en la línea fronteriza va tener un problema de agenda. Sí hay los usos electorales, sí hay discursos que promueven xenofobia y se aprovecha en el sentido más vulgarde aprovechar algo, que personas con necesidades en estos flujos migratorios formen parte de esa política interna”.

Guillén sostiene que, al margen de la coyuntura electoral de Estados Unidos, México debe impulsar un proyecto estructural mucho más avanzado.

Pareciera que Estados Unidos quiere fijarnos la política migratoria atando la cuestión migratoria a la cuestión comercial, ahí están las aduanas varadas, la lentitud en el flujo de mercancías que se mantendrá mientras tú no me detengas a los migrantes.

¿Compartes ese punto de vista?

No, definitivamente no, creo que es además injustificado, o sea México no forma parte ya de los flujos migratorios hacia Estados Unidos, México ha definido un proyecto de política migratoria propia, en este gobierno ya se definió todo un escenario alternativo de desarrollo, sobre todo en nuestra región sur, y hay que separar de manera muy clara entre la definición de la política migratoria mexicana y la coyuntura electoral de Estados Unidos.

¿Pero tú sí ves el intento norteamericano de que México le haga el trabajo sucio en materia migratoria?

De largo tiempo, por lo menos desde 2005, 2006, cada vez ha habido presiones de Estados Unidos más intensas por que México se convierta en una barrera de flujos migratorios del sur, no ha ocurrido en el tono ni en la forma en que quisiera EUA, hay una política migratoria sobre todo ahora, que se definió de manera muy distinta de ese interés de EUA, y te doy el ejemplo más claro, que es todo el proyecto de desarrollo para el sur de México y el norte de Centroamérica, y en lo que nos toca a nosotros el de los instrumentos de la movilidad regional para que tengamos toda una nueva región de desarrollo.

¿Estás viendo también ahí un ingrediente político por parte de Cuba y de Nicaragua para generar problemas a Estados Unidos?

No sabría responder esa parte, lo cierto es que sí es una movilización que tenía tiempo, pero ahorita como que incrementó números, sobre todo porque Nicaragua abrió más su frontera a cubanos y entonces viajan de Cuba con financiamiento de Miami, de familiares de cubanos en Miami hacia Nicaragua o Panamá y de ahí la movilidad hasta México.

Guillén recalca que México enfrenta un fenómeno migratorio de gran escala que atraviesa por un “pico” o “aceleramiento”, cuya principal novedad es el cambio en la composición de su flujo: de hombres jóvenes a familias y mujeres con niños, Estos últimos, dice, son usados como “escudo” y como “llave de entrada”.

Asevera que los flujos migratorios siguen teniendo un origen principalmente social y de asimetrías de desarrollo, aunque advierte que detrás de ellos también hay una “economía negra” que mueve mucho dinero y puede generar corrupción en las rutas hacia EUA.

“Lo que más vemos o vimos en los meses anteriores fueron las caravanas y esas caravanas no son construcciones espontáneas, o sea, hay una promoción, hay una organización”.

¿De quién?

Pues ese es el punto, que tenemos que investigar con toda claridad porque son organismos, no ocurren solitas (las caravanas).

¿Qué presumes?

Son organizaciones

¿Criminales, políticas?

Hay de todas, incluso puede haber organismos de buena fe, defensores de migrantes de derechos humanos que participan en esta promoción, pero también hay intereses de tráfico, nosotros vimos de manera muy evidente aquel caso de Tijuana, la caravana que llegó a Tijuana.

¿Somos el trampolín del crimen organizado que se dedica a la trata de personas?

Somos parte de ese trampolín sin duda, hay una estructura que requiere de una intervención internacional mayor porque es un asunto bastante complejo y sofisticado.

¿El factor fuerte cuál es, el criminal, el político?

Es una combinatoria, es difícil de precisar porque por ejemplo en Centroamérica sin duda hay factores estructurales que están relacionados con estas crisis que tienen ya largo tiempo, y en especial Honduras, es un país con muchas dificultades y muchas desigualdades.

El Comisionado reitera que la estrategia migratoria que se implementó al arranque de la Administración no ha cambiado, aunque reconoce que está pasando de lo emergente a la construcción de un proyecto estructural de mayor escala.

Explica que ese proyecto implica la generación de una gran región de desarrollo, inversión y economías dinámicas, así como la expedición de tarjetas de visitante regional a ciudadanos de El Salvador y Honduras.

“Cada año hay aproximadamente 700 mil eventos de cruce de Guatemala a México por razones laborales, ya hay un mercado laboral muy grande, es poco conocido pero es un mercado ya muy estructurado, es una movilidad circular, pero lo importante es que esa economía ya existe, es una economía ya estructurada, hay que mejorar sus condiciones”.

¿Tenemos esa capacidad?

Se crea, el asunto es crearlo, hace 50 años nuestra frontera norte las ciudades mayores tenían los peores índices en servicios públicos tan básicos como agua, drenaje, electricidad y a partir de ahí se construyen iniciativas de desarrollo y se genera un modelo de desarrollo fronterizo.

Esta estructura se parece en el sur, hay un proceso progresivo de interdependencias y hay dos maneras de avanzar en ese proceso: uno, asumir que no existe, lo cual sería negar dinámicas sociales y económicas en curso, o le construyes los instrumentos de su desarrollo y es lo que estamos haciendo ahora, lo que viene.

¿Estamos hablando de un país multinacional?

Ya estamos en esa ruta, ya estamos en eso.

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