Estados Unidos y México, a través de San Diego y Tijuana, tienen constante colaboración en aspectos como el turismo, cultura, gastronomía, artesanías, playas y museos de cada país, debido a la cercanía entre ambas naciones.

Sin división de fronteras a pesar de la línea que separa a los dos países, se da la colaboración entre los países dando a conocer sus mejores atractivos en comida, hospedaje, restaurantes y parques.

Uno de los proyectos donde han trabajado juntos es el Baja by the Sea, donde los municipios de Baja California se trasladaron a San Diego y mostraron lo que ofrece Tijuana, Rosarito, Ensenada, Tecate, Mexicali y el Valle de Guadalupe.

El hundimiento del Buque Uribe 121, que creó el primer arrecife artificial del pacífico mexicano, brindó la oportunidad a buzos estadounidenses de visitar y conocer más sobre México, a través del extenso mar con el que cuenta esta entidad.

La langosta de Puerto Nuevo es un gran atractivo para el turismo del vecino país del norte que frecuentemente asiste a degustar este fresco crustáceo acompañado de frijoles, arroz, salsa y grandes tortillas de harina.

Además otros alimentos como la ensalada césar, la cerveza artesanal y el vino del Valle de Guadalupe, donde se presentan grandes artistas internacionales como Plácido Domingo. Otro gran motivo por el que visitan este estado es por tomarse una fotografía con el burro-cebra de Tijuana, en la emblemática Avenida Revolución, donde los fines de semana es la zona más transitada del país.

La línea fronteriza por el faro de Playas de Tijuana llama mucho la atención a los visitantes que no pueden creer que la división entre las dos naciones sea el mar y se toman fotografías con la división de fondo. A su vez, muchos mexicanos cruzan diariamente a la unión americana para trabajar o comprar ropa, zapatos, comida y también para conocer los atractivos turísticos que ofrece.

El secretario de Turismo estatal, Oscar Escobedo Carignan, en entrevista con Notimex, indicó que el turismo que promueve Baja California es médico, de negocios, convenciones, de aventura, naturaleza, cruceros, cerveza artesanal e impulso de la Ruta del Vino.

Manifestó que esta dependencia tiene un calendario de más de 600 eventos anuales y que el turismo empresarial y de reuniones es un mercado muy importante al igual que el de salud y bienestar que provoca gran movimiento en el estado. Mientras que Ives Lelevier Ramos, subsecretario de Turismo, expresó que la cooperación binacional en diversos proyectos pretenden hacer de la región una de las más competitivas, fortaleciendo los lazos entre Tijuana y San Diego en los sectores médico, aeroespacial, industrial, automotriz y electrónico.

Una de las más grandes colaboraciones es el puente de 180 metros que cruza la línea divisoria entre México y Estados Unidos, donde la terminal aérea binacional los une mediante el aeropuerto de Tijuana.

Detalló que desde hace algunos meses existe una gran colaboración con el programa Two Nations Vacations, “Vacaciones en Dos Naciones”, que consiste en aprovechar la oferta turística que tiene la ciudad de San Diego y el estado de Baja California.

Lelevier Ramos puntualizó que Baja California y el Sur de California se promueven como una sola región competitiva a través de Cali-Baja, en la industria, el turismo y la cultura, ya que la frontera que las une es de las más dinámicas.

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