A las autoridades del gobierno de Estados Unidos les preocupa que las personas con ciudadanía mexicana y estadounidense puedan regresar al país si el brote de coronavirus en México empeora, exigiendo más a los hospitales locales, especialmente cerca de la frontera, dijeron funcionarios con conocimiento del tema.

Las preocupaciones, que previamente no habían sido reportadas, se dan en momentos en que los hospitales de San Diego, en el sur de California, han presionado al gobierno de Donald Trump para que tome más medidas para limitar la amenaza de que el virus entre a Estados Unidos a través de la frontera.

Si bien autoridades de alto rango del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) han expresado sus preocupaciones sobre las personas con doble nacionalidad, actualmente no hay planes para prohibirles el ingreso o realizar otros cambios a las operaciones fronterizas, según un funcionario que pidió la condición de anonimato para discutir el tema.

“No creo que exista interés en decirle a los ciudadanos estadounidenses que no pueden volver”, comentó el funcionario.

El tema ha surgido en discusiones sobre un potencial aumento de inmigrantes si la economía de México se deteriora o si el brote abruma al sistema sanitario del país, según las fuentes.

Trump ha suspendido los viajes no esenciales a través de las fronteras terrestres con Canadá y México, afirmando que las restricciones son necesarias para proteger a Estados Unidos.

Hasta el momento, los temores de un enorme flujo no se han concretado. Estados Unidos tiene el mayor número de muertes por coronavirus en el mundo y su economía está cayendo en picada, con la tasa de desempleo en su mayor nivel desde la Gran Depresión.

Los opositores de Trump lo acusan de explotar la pandemia para impulsar su campaña para restringir la inmigración legal e ilegal a Estados Unidos en un año electoral.

Leon Rodriguez, exdirector de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos bajo el presidente Barack Obama, dijo que cualquier medida para evitar que los ciudadanos estadounidenses entren al país generaría “graves temas constitucionales”, una idea respaldada por varios expertos.

Unos 1,5 millones de ciudadanos estadounidenses viven en México, según estimaciones del Departamento de Estado de Estados Unidos, muchos de ellos jubilados.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de México no comentó de inmediato si el tema de las personas con doble nacionalidad ha sido planteado por Estados Unidos. El DHS no respondió a una solicitud de comentarios.

Carlos González Gutiérrez, cónsul general mexicano en San Diego, dijo que algunas autoridades en Estados Unidos “describen en forma errónea la situación en la frontera respecto a la población nacida en el extranjero con propósitos electorales cortoplacistas”.

En las discusiones del gobierno de Trump, las autoridades han detallado varios escenarios que podrían provocar una avalancha de personas que intente cruzar la frontera sur.

Uno podría ser que la economía de Estados Unidos mejore y la de México enfrente repercusiones más severas por la pandemia y el colapso de los precios del petróleo, según dos funcionarios estadounidenses.

Otra podría ser que Estados Unidos desarrolle con éxito una vacuna o tratamiento terapéutico para el COVID-19, la enfermedad respiratoria causada por el coronavirus, dijo uno de los funcionarios.

Reporte de Ted Hesson y Jonathan Landay en Washington; Mica Roseberg en Nueva York; Kristina Cooke en Los Ángeles; Frank Jack Daniel en Ciudad de México, Editado en Español por Ricardo Figueroa

No hay comentarios

Agregar comentario

A fin de garantizar un intercambio de opiniones respetuoso e interesante, Tijuanotas se reserva el derecho a eliminar todos aquellos comentarios que puedan ser considerados difamatorios, vejatorios, insultantes, injuriantes o contrarios a las leyes a estas condiciones. Los comentarios no reflejan la opinión de Tijuanotas, sino la de los internautas, y son ellos los únicos responsables de las opiniones vertidas. No se admitirán comentarios con contenido racista, sexista, homófobo, discriminatorio por identidad de género o que insulten a las personas por su nacionalidad, sexo, religión, edad o cualquier tipo de discapacidad física o mental.