El próximo martes se llevarán a cabo las elecciones federales intermedias en Estados Unidos. Este tipo de eventos siempre pasan desapercibidos en México. Que se elija la totalidad de los 435 escaños en la Cámara de Representantes y 33 asientos (un tercio)  del Senado no le interesa al público mexicano. Esta vez, sin embargo, el tema sí es importante.

Primero, porque será la primera prueba en las urnas del presidente Donald Trump. Hay que recordar que hoy por hoy los republicanos tienen mayoría en ambas cámaras del Congreso estadunidense. Eso le ha dado mucha tranquilidad a Trump para, por un lado, avanzar en su agenda legislativa y, por la otra, tener un Poder Legislativo que lo arropa y no lo fiscaliza. Hay que recordar que el Presidente estadunidense ha estado involucrado en una serie de escándalos que no han tenido repercusiones políticas porque los republicanos en ambas cámaras lo han protegido. Esto cambiaría si el martes los demócratas ganan el control de alguno de los dos cuerpos legislativos. Tendríamos a un Donald Trumpdebilitado, con todo lo que eso implica para la relación bilateral con México, que vaya que ha sido complicada en estos dos últimos años.

Segundo, vale la pena recordar que, después de más de año y medio de negociaciones intensas, México, Canadá y Estados Unidos llegaron a un acuerdo para firmar un segundo Tratado de Libre Comercio que sustituirá al actual todavía vigente: el llamado USMCA. Para que finalmente entre en vigor, las legislaturas de los tres países tienen que ratificarlo. En México, no habrá problema, ya que el nuevo Tratado cuenta con el apoyo del Presidente electo, quien tiene una cómoda mayoría en el Senado. El primer ministro de Canadá también tiene mayoría en su parlamento, por lo que tampoco será problema aprobar ahí el nuevo acuerdo.

La duda está, en todo caso, en ambas cámaras del Congreso estadunidense. Y ahí las cosas siempre son de contar voto por voto porque los intereses de representantes y senadores son locales. Suele suceder que legisladores del mismo partido del Presidente votan en contra de éste y que opositores lo apoyan. En este sentido, independientemente si los republicanos se quedan con el control de las dos cámaras o los demócratas se quedan con una de ellas, en cuanto sepamos quiénes fueron los ganadores se podrá hacer el análisis si estarán de acuerdo o no con aprobar el nuevo Tratado. La realidad es que el destino del próximo USMCA depende de los resultados electorales del martes próximo.

Finalmente, está el tema de la migración y de la seguridad en la frontera sur de Estados Unidos, es decir, con México. Ese ha sido uno de los grandes temas de las elecciones en nuestro vecino. No nos hemos dado cuenta porque se trata de competencias distritales o estatales que no han generado el mismo escándalo que hace dos años cuando la contienda fue nacional con un candidato, Donald Trump, que insultó y agravió a los mexicanos todos los días.

La extensa frontera con México, la posibilidad de construir un muro y los supuestos horrores de los inmigrantes indocumentados están siendo utilizados para movilizar al electorado. Doy un ejemplo. En la competencia por el segundo distrito de la Cámara de Representantes de Minnesota, los candidatos nunca hablaron de la frontera de ese estado con Canadá, sino con la distante con México. El republicano reiteró la urgente necesidad de construir un muro fronterizo. La demócrata propuso que mejor utilizar drones y sonares para encontrar túneles para evitar que la gente se pase por arriba o por abajo.

En cualquier caso, de nuevo, el desenlace de las elecciones del martes en Estados Unidos marcará la política migratoria y fronteriza de México con ese país. No es gratuito, en este sentido, que Trump esté apoyando a los candidatos de su partido utilizando el asunto de la caravana migrante de centroamericanos que se encuentra cruzando por nuestro país. Según el Presidente de EU, hasta el mismísimo Lucifer viene en ella, por lo que hay que detenerla con todo el poder militar de la súper potencia.

Así que deberemos seguir de cerca lo que suceda el martes en EU. Por lo pronto, ayer, en el mercado de apuestas políticas de predictit.org, los apostadores le estaban dando un 70% de probabilidad a los demócratas de arrebatarle la mayoría a los republicanos en la Cámara de Representantes y un 80% de probabilidades de que los republicanos mantengan el control del Senado.

                Twitter: @leozuckermann

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